Así lo afirmó en declaraciones a los medios de comunicación en el Palacio de Cibeles tras el pleno celebrado hoy donde se aprobaron las nuevas normas urbanísticas del Plan Generao,l de Ordenación Urbana, renovando el anterior, que databa de 1997.

Almeida apuntó que, aunque no están incluidas las viviendas de uso turístico en dicha modificación de normas urbanísticas, desde el Área de Urbanismo se va a trabajar en los próximos meses en dos cuestiones esenciales.

En primer lugar, en la determinación del mejor tratamiento normativo por parte del Ayuntamiento de las viviendas de uso turístico para introducir una regulación que dé seguridad jurídica, en la que “hay que acoger una realidad como es la vivienda de uso turístico”, pero donde remarcó que “para nosotros es fundamental primar el descanso y la calidad de vida, el bienestar de los vecinos y mantener el carácter residencial de la ciudad de Madrid”. Por tanto, “ahí es donde se va a establecer una regulación para poder conciliar ambos intereses”.

En segundo lugar, continuó, “por supuesto inspeccionar las viviendas de uso turístico que sean ilegales en esta ciudad y tener los medios materiales necesarios”. El alcalde recordó que ya se hicieron inspecciones durante la anterior legislatura, donde “se dictaron órdenes de clausura y se culminaron procedimientos sancionadores”, pero apuntó que “es obvio que, ante la proliferación de viviendas de uso turístico, tenemos que fortalecer las actuaciones de inspección que hay en la ciudad de Madrid”.

Por tanto, Almeida aseguró que el Consistorio madrileño va a trabajar “tanto en establecer una normativa que sea clara y dé seguridad jurídica como en gestionar la inspección de las viviendas de uso turístico ilegales para llegar incluso a clausurar aquellas que no cumplan con los parámetros vigentes en nuestra normativa”.