Así se expresó el alcalde durante un acto cerca de Parque de las Avenidas hasta el que se acercaron los vecinos para protestar y para hablar con el alcalde sobre este asunto. Esta tarde, además, los vecinos se van a reunir con el delegado de Urbanismo, Medioambiente y Movilidad, Borja Carabante, para abordar la situación.

En cualquier caso, Almeida explicó que se está “estudiando la implantación del uso turístico” en ese hostel y subrayó que “cualquier requisito que no se cumpla será denunciado de forma inmediata”. Por otra parte, señaló su preocupación por que el Gobierno quiera “darle otro destino que no sea el turístico” a ese alojamiento.

Preguntado por si este lugar se podría dedicar a hospedar a personas inmigrantes o solicitantes de asilo dijo que tienen “la sospecha fundada de que esto es así porque en otros lugares de esta manera actúa el Gobierno de España”.

En ese sentido, advirtió que el Gobierno de España “no va a actuar en fraude ley” ni hacia “los vecinos” ni hacia el Ayuntamiento. “Que tenga la tranquilidad de que vamos a estudiar tanto si cabe el uso turístico, como todos los requisitos de implementación del uso y en segundo lugar, si el gobierno de España pretende utilizarlo para otro fin, que no sea el turístico”.

Con respecto a la situación de la inmigración en Madrid se remitió a la situación de Carabanchel donde hay un recurso de alojamiento para personas en situación irregular. “No sabemos cuántos vienen, cuánto tiempo están, qué rotación tienen en la ciudad de Madrid, si en algún momento dado han dejado de estar en Carabanchel y se les ha perdido el rastro por parte del Gobierno de España. Es imposible hablar con el Gobierno de España en estos términos porque jamás dan ningún tipo de información al respecto”.

VECINOS

Los vecinos que acudieron a protestar al acto de Almeida repartieron además circulares con información acerca del proyecto del hostel. Según estos vecinos se trata de tres locales pertenecientes a tres comunicades de vecinos que “sólo aceptaron la unión como uso para el centro de salud”.

Añaden que “la persona que lo alquila es un empresario experto en montar estos hostales para mochileros low cost” para después “convertirlos en centros de inmigración sin cumplir con los requisitos turísticos” y “gracias a acuerdos con ONG, administraciones locales, regionales y ministerios”.

Uno de los representantes de los vecinos José Manuel Ramos explicó que actualmente “no hay licencia de funcionamiento, por lo tanto no pueden abrir”. Afirmó que por el momento no saben si van a traer inmigrantes pero dicen que quien “lo sabe es el Ayuntamiento”. No obstante, advirtió que “si no traen turistas, dejará de ser un hostel legal para ser un hostel ilegal”.