Álvarez se expresó en estos términos durante la apertura del IV Comité Interconfederal de UGT, donde criticó el funcionamiento del mercado de los carburantes, de la electricidad y de las entidades financieras.

En este punto, arremetió contra la CNMC por no actuar ante el comportamiento de las empresas que, ahora que se reduce el precio del petróleo, no recortan en la misma medida el coste de los carburantes.

"Competencia actúa de manera inmediata contra los débiles pero es incapaz de plantar cara a los fuertes en este país. Y hay que denunciarlo. No podemos tener una Comisión de la Competencia que solo machaque a los más débiles y que sea incapaz de plantar cara a las petroleras", abundó.

También denunció que los bancos estén diciendo que van a trasladar el coste del nuevo impuesto a los ciudadanos. “No es posible que haya un desafío de esas características por parte del sector financiero al Estado teniendo en cuenta que tiene una deuda de casi 60.000 millones de euros, que es lo que se llevaron en la anterior crisis económica”, previno Álvarez.

En su opinión, “hay mucha gente que se está quedando atrás en nuestro país a pesar de los esfuerzos” del Gobierno. En este sentido, alabó la subida de las pensiones con el IPC en el marco de la primera fase de las pensiones, así como la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2023 en el Congreso de los Diputados.

PENSIONES

En su intervención, avisó de que desde su sindicato se tendrá que defender en los próximos meses el acuerdo de pensiones, ya que el PP y la CEOE se están posicionando en contra de revalorizar pensiones con el IPC. A su juicio, España vive un "intento de pelear a jóvenes con sus abuelos" y "a los pensionistas que cobran más con los que cobran menos", criticando que haya quienes apuesten por no revalorizar las pensiones máximas con la inflación.

"Hay que explicar que en nuestro país el sistema es de reparto y el que cobra una pensión muy alta ha pagado cotizaciones muy superiores a las que se derivan de su pensión", añadió Álvarez, quien dijo que ahí están "algunos a los que les gustaría" que el sistema público de pensiones "diera paso a un sistema mixto" para que las pensiones más altas no coticen en el sistema general y lo hagan en uno privado.

En cuanto a la fiscalidad, el secretario general de UGT saludó las nuevas figuras fiscales, como el gravamen a la banca y a las energéticas, aunque subrayó que le hubiera gustado que estos tributos fueran permanentes y no temporales. "El Gobierno parece que a veces arrastra los pies", aseveró.

Además, mostró su “profunda decepción” y “desacuerdo” con la propuesta del Ministerio de Seguridad Social para ampliar el período de cálculo de la pensión y señaló que en esta ocasión será más difícil que se pueda alcanzar un acuerdo en la mesa del diálogo social.

REFORMA LABORAL

Además, volvió a celebrar los resultados que está dando la reforma laboral en el mercado de trabajo. “La apocalipsis que nos anunciaban afortunadamente no ha llegado”, apuntaló el líder sindical quien, eso sí, recordó que casi tres millones de personas siguen en desempleo. Al respecto, urgió a mejorar las políticas activas de empleo, con especial atención a las administraciones autonómicas.

Del mismo modo, defendió que aquellos sectores que están teniendo dificultades para cubrir algunas vacantes es por las condiciones laborales que ofrecen y explicó que no responde a que en España haya un “exceso” de subsidios sociales, una idea que alertó de que la promueve la “extrema derecha”.

Por otra parte, cargó contra las “posiciones cerradas” de la CEOE en la mesa de negociación colectiva para no llegar a un acuerdo general sobre la evolución de los salarios en convenio. Por ello, pidió a los miembros de UGT que no se firmen convenios sin “unas exigencias mínimas” y si no se introducen cláusulas de revisión salarial que garanticen el poder de compra de los trabajadores. De hecho, auguró que en 2023 se plantearán nuevas movilizaciones por parte de UGT y CCOO para alentar “conflictos” y “movilizaciones”.

Igualmente, exigió que el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) llegue a los 1.100 euros en 2023, “más allá de los debates que tenga el Gobierno” o de las críticas que pueda plantear la patronal.

Álvarez citó como prioridades del sindicato también la lucha contra la desigualdad entre hombres y mujeres, la necesidad de aprobar un despido “restaurativo”, la lucha contra el cambio climático, y la importancia de la Ley de empleo, en trámite parlamentario.

CONTEXTO INTERNACIONAL

En su alocución, Álvarez también se refirió al contexto internacional, marcado por la guerra de Ucrania, sobre la que exigió que este país pueda volver a recuperar las fronteras anteriores a la invasión rusa.

Sobre China, celebró que este país “despierta”, en referencia a las protestas ciudadanas desencadenadas por la política de ‘covid cero’ del Ejecutivo del gigante asiático. A su juicio, estas movilizaciones son un “elemento de cierta preocupación, obviamente, porque a todo el mundo le gusta la estabilidad”, pero “los demócratas también lo vemos con una cierta ilusión de que, finalmente, aparte de hacer ese proceso a la economía de mercado, China haga un proceso hacia la libertad”.

En Latinoamérica, el líder sindical aplaudió los positivos resultados electorales de la izquierda, poniendo como ejemplo a Colombia y a Brasil, mientras que mostró su preocupación por el avance de la “ultraderecha” en Europa.

En concreto, cargó contra el “apagón informativo” sobre los “ataques” del Gobierno italiano a las políticas sociales y lamentó que en Francia, pese a que la “extrema derecha” no gobierna, sí se están aprobando medidas relevantes con su apoyo.