Lo dijo en el acto de homenaje que UGT celebra este jueves para recordar la figura de Nicolás Redondo Urbieta, quien fuera secretario general de UGT entre 1976 y 1994.

Pese a la valoración positiva general, Álvarez señaló que se debe tener en cuenta que los productos básicos suben en mayor medida y afecta a las rentas más bajas. Asimismo, exigió al BCE que “acabe con estos tipos de interés en el nivel en el que están”.

“Lo necesitamos para generar empleo, para generar actividad, para las familias puedan pagar con cierta holgura o con más posibilidades las hipotecas”, añadió.

Por otra parte, sobre el salario mínimo interprofesional (SMI), reclamó que la CEOE diga “si mantiene su palabra” para que este indicador pueda crecer un 4%. “A partir de ahí estaremos en condiciones de poder cerrar un acuerdo. Si dice que no, yo también quiero decir claramente que nosotros vamos a tener una posición más exigente con el Gobierno”, advirtió.

Y ello será así, según Álvarez, porque “no es lo mismo un SMI pactado con la CEOE, que tendrá un desarrollo muy positivo, que no pactado, que siempre es mucho más complicado de aplicar”.

Por último, volvió a apoyar la petición de la patronal de que los contratos públicos tengan en cuenta el coste del SMI, “porque en la medida en que no se haga va a ser” perjudicial para los trabajadores.