AMNISTIA PUBLICA UN NUEVO INFORME SOBRE LOS PRESOS TRAS EL 11-S

- "¿Por qué estoy encarcelado?. ¿De qué se me acusa?": extracto de la carta de uno de los detenidos

MADRID
SERVIMEDIA

Seis meses después de los atentdos del 11 de septiembre, Amnistía Internacional (AI) ha hecho público un nuevo informe sobre la situación en la que se encuentran las personas que fueron detenidas en Estados Unidos después de los ataques terroristas.

En el informe, AI denuncia que un importante número de personas siguen privadas de algunos derechos fundamentales garantizados en las normas internacionales, y que muchas parecen haber sido recluidas arbitrariamente.

El documento, según explicó la organización, se basa en investigaiones que incluyen numerosas entrevistas con abogados, detenidos y familiares y visitas a dos centros de detención.

"Estas detenciones se han visto rodeadas de un secreto absoluto, lo cual crea las condiciones que facilitan la comisión de abusos", señaló Amnistía, que añadió que sus investigaciones confirman que se han violado algunos derechos fundamentales que asisten a las personas privadas de libertad, "como el derecho a ser tratado con humanidad, a ser informado de los motivos de la detención, a tner acceso pronto a un abogado, a disponer de los medios para impugnar la legalidad de la detención y a ser considerado inocente hasta que se demuestre lo contrario".

AISLADOS Y CON GRILLETES

Entre las denuncias sobre tratos crueles que incluye el informe destacan los casos en que se ha recluido a las personas durante periodos prolongados en régimen de aislamiento, se las ha encadenado con múltiples grilletes durante visitas o cuando las trasladaban a los tribunales, o no se les ha proporcionado la portunidad de hacer ejercicio adecuado.

El documento incluye testimonios de algunos de los recluidos, por ejemplo el de una persona que permanece en el Centro de Detención Metropolitano, en Brooklyn, Nueva York, por una infracción de las normas sobre inmigración.

A continuación se recoge el extracto de una de sus cartas: "Hace tres meses y medio que estoy recluido en régimen de aislamiento y, cuando se celebre la próxima vista, ya llevaré aquí cuatro meses. [...]. "¿Por qué estoy encarcelado? ¿Po qué en régimen de aislamiento? y, ¿por qué sometido a medidas de máxima seguridad?. Tengo muchas preguntas pero ninguna respuesta. ¿De qué se me acusa?. Nadie lo sabe".

Otro ejemplo que incluye el informe es el de Rabid Haddad, ciudadano libanés acusado de permanecer en el país una vez expirado su visado de turista. Está recluido en régimen de aislamiento en el Centro Penitenciario Metropolitano de Chicago desde el 14 de diciembre. Según las cartas que ha enviado desde la cárcel, las ventanas de su clda están pintadas de blanco de modo que no se puede ver el exterior; le esposan las muñecas cada vez que lo escoltan a las duchas de seguridad situadas a unos diez pasos de su celda; y sólo le permiten hacer una llamada telefónica de 15 minutos a su familia cada 30 días.

Amnistía Internacional también mostró su preocupación por el hecho de que a las personas detenidas en relación con los atentados del 11 de septiembre se las encadene sistemáticamente con grilletes para trasladarles a los tribunales. "A los reclusos del Centro de Detención Metropolitano de Nueva York se les obliga a llevar grilletes múltiples en las muñecas, la cintura y los tobillos durante su comparecencia ante los jueces de inmigración (en vistas que se celebran en el mismo edificio), en contravención directa de las normas internacionales", denuncia Amnistía.

Con todo ello, Amnistía Internacional reconoce que el Gobierno tiene la obligación de tomar todas las medidas necesarias para proteger a los ciudadanos de posibles ameazas contra su seguridad, pero ve con preocupación que se esté usando el Servicio de Inmigración para mantener recluidas a las personas sobre la base de indicios poco sólidos, mientras se hacen amplias investigaciones criminales, sin ofrecerles las salvaguardias adecuadas.

(SERVIMEDIA)
14 Mar 2002
SBA