En su opinión, el Ejecutivo "ha impulsado que el dinero negro tenga la importancia que ahora se le atribuye", lo que ha producido graves distorsiones en la economía española, como la fuerte elevación de los precios de los pisos en las grandes ciudades.

Anguita recalc la necesidad de hacer emerger ese dinero a la economía oficial para que pague impuestos y cotice a la Seguridad Social, y respaldó la idea de poner coto a cualquier posibilidad de amnistía fiscal en el futuro.

A su juicio, la regularización fiscal que concluirá el próximo 31 de diciembre debe ser la última porque crea situaciones en las que se conculca el principio constitucional de igualdad, al dar a unos ciudadanos la posibilidad de ponerse a bien con Hacienda en unas condiciones favorables de las ue no han disfrutados la mayoría.

Izquierda Unida ha ofrecido su apoyo al ministro de Economía, Carlos Solchaga, en su propuesta de introducir una disposición en los Presupuestos del Estado para 1992 que prohiba la promulgación de amnistías fiscales en el futuro.