El "Actiq" es un fuerte analgésico que llega a la sangre antes que ualquier otra pastilla. De esta manera, se convierte en un remedio eficaz para los serios dolores que padecen los enfermos de cáncer.

Pero el "Actiq" tiene la forma de un chupa-chups y por ello sus críticos han advertido que se producirán accidentes entre los niños, ya que si llega a sus manos es muy probable que lo confundan con uno de estos caramelos.

Sin embargo, el Gobierno estadounidense ha tomado estrictas medidas para su embalaje y presentación. El narcótico se presentará con un envoltoriode aluminio para que se abra con tijeras y se mantenga fuera del alcance de los más pequeños.

Este fármaco es el primero para controlar los ataques de dolor agonizante que se producen en enfermos de cáncer y puede aliviar los síntomas, sin moverse de casa, en pocos minutos. Hasta ahora sólo unas inyecciones de fuertes medicamentos, suministradas en los hospitales, podían tener esos resultados tan rápidos.