Así lo indicó Aragonès en un desayuno informativo organizado por Europa Press al que, entre otras personalidades, asistieron la ministra de Educación, Formación Profesional y Deporte y portavoz del Gobierno central, Pilar Alegría; la consejera de Economía de la Generalitat catalana, Natàlia Mas, y la portavoz de EH Bildu en el Congreso, Mertxe Aizpurua.

Aragonès explicó que su propuesta busca que Cataluña “pueda gestionar, recaudar y liquidar todos los impuestos, tener capacidad normativa, poder decidir sobre todos los tributos y adaptarlos a las necesidades de los ciudadanos” y acordar con el Estado “una aportación para los servicios que presta en Cataluña” y “una cuota de solidaridad” limitado en el tiempo.

El sistema que propone Cataluña “no es nuevo”, existe en el País Vasco y en Navarra, es “la base” de una “nueva relación bilateral” entre el Estado y Cataluña que persigue que la Generalitat “recaude y gestione todos los tributos” que se generan en esta comunidad y supone un “hito más” en la “resolución del conflicto político”.

NEGOCIACIÓN BILATERAL

“El fundamento de este sistema que proponemos es la bilateralidad con el Estado y este debe ser el punto esencial de la singularidad que requiere Cataluña, una relación de tú a tú”, comentó Aragonès, quien aseguró que él no va a “negociar con otros territorios” ni decirles qué sistema de financiación deben tener.

Pero, prosiguió, tampoco va a aceptar que se “condicione” por parte de otros territorios “los recursos que deben llegar a la ciudadanía de Cataluña”. Por tanto, incidió en que aspira a una relación “bilateral” porque, a juicio del presidente catalán, la “única forma de defender los intereses de la ciudadanía de Cataluña y acabar con el déficit fiscal”.

Aseguró que si el tema de la financiación se aborda en una negociación multilateral “no habrá acuerdo”. Preguntó si alguien se imagina que “en el actual contexto polarización política”, con una mayoría de comunidades gobernadas por el PP, que está llevando a cabo “un asedio contra el Gobierno, Cataluña y contra el Congreso”, poder llegar a un acuerdo.

APOYOS

Señaló que si el PSC quiere “defender los intereses” de los catalanes “debería apoyo” a esta propuesta, pero lamentó que tiene la “dicotomía” entre esta opción o “enfrentarse al Gobierno de turno del Estado” cuando puede haber una “colisión” entre ambos intereses y “normalmente decepciona”. Por ello, le reclamó que, “por una vez”, opte por los intereses de los ciudadanos de Cataluña y no por “los del PSOE”.

Según Aragonès, Cataluña necesita dotarse de “mayores cuotas de poder” y, en este sentido, necesita una propuesta de financiación singular. Reconoció que la economía de esta comunidad es “sólida y potente” y que “va bien, va muy bien”, aunque cuenta con “muchos retos”, pero “queremos seguir creciendo”.

A su juicio, “no basta con los recursos y herramientas” que tiene actualmente, sino que, si quiere “avanzar” hay que “acabar con el déficit fiscal”, es necesario contar con “nuevas herramientas” como una financiación singular para que Cataluña recude “todos los impuestos” y administre “todos los recursos que generamos como país”.

Comentó que, si con “tan pocas herramientas” y “tantas dificultades” la economía de Cataluña está así, “imagínense lo que podríamos hacer no solo en relación a los ciudadanos” de esta comunidad autónoma, sino “al conjunto de los ciudadanos de todo el Estado y de Europa con todas las herramientas para ofrecer prosperidad y bienestar a nuestra ciudadanía”.