Según explicó Arcópoli, este cambio supone un “retroceso histórico” porque la Comunidad de Madrid relega al colectivo Lgtbi+ del ámbito de la igualdad al de la asistencia y se “deja de reconocer” como una ciudadanía con derechos para tratarnos como un colectivo vulnerable, sin entender que su vulnerabilidad “no es inherente a quienes son, sino consecuencia de un sistema social que aún discrimina y margina”.

Aunque en el plano legal se alcanzaron avances, la igualdad social real sigue “lejos de ser una realidad”. Este traslado de las políticas “no es una simple reorganización administrativa”, sino que es un “cambio de paradigma político”. Cuando las políticas Lgtbi+ se integran en Igualdad, se abordan desde el “reconocimiento, la equidad y los derechos humanos”.

Al moverlas a “Exclusión Social”, el Gobierno regional “relega al ámbito de la asistencia, como si la diversidad sexual y de género fuera una situación de desamparo y no una cuestión de igualdad y justicia”, denunciaron desde Arcópoli.

Este cambio tiene otras consecuencias directas como, por ejemplo, se “despolitiza” la diversidad y se “deja de abordar” la Lgtbifóbia como una forma de discriminación estructural, se “invisibiliza” la agenda de igualdad, al eliminar espacios de interlocución y capacidad política y se “pierde” el enfoque de derechos humanos, sustituyéndolo por uno puramente asistencial y caritativo. Ante todo ello, la organización exigir “responsabilidad y restitución” de derechos.