ARGELIA. MENDILUCE CREE QUE ESPAÑA "NO ESTA JUGANDO EL PAPEL" QUE LE CORRESPONDE EN EL CONFLICTO, EN PARTE POR MOTIVOS ECONOMICOS

- El Parlamento Europeo debatirá próximamente la suspensión de las negociaciones del acuerdo de asociación con Argelia mientras no tome medidas contra las masacres

- Achaca parte del ascenso del integrismo a la corrupción y la mala situación económica en la que vive la población

MADRID
SERVIMEDIA

El vicepreidente de la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento Europeo, José María Mendiluce, consideró hoy que España "no está jugando" en el conflicto de Argelia el papel que le correspondería como "país vecino de la Unión Europea y promotor como ninguno del diálogo entre las dos orillas del Mediterráneo". A esto "no es ajeno", dijo a Servimedia, "el hecho de que seamos el primer cliente de Argelia en términos energéticos".

El "volumen de atrocidades" que se están cometiendo desde hace cinco años requera, a su juicio, una posición "firme" hace mucho tiempo, que no se ha adoptado por "una mezcla de intereses económicos muy fuertes y de miedo al fundamentalismo islámico".

Por este motivo, juzgó "esencial" la creación de una comisión internacional de encuesta para averiguar lo que está sucediendo realmente. "Si el Gobierno argelino no tiene nada que esconder, no tiene por qué temer esa comisión", agregó.

De hecho, la decisión de las autoridades argelinas de expulsar del país a las asociaciones de erechos humanos y a los periodistas extranjeros "sólo abona la hipótesis de que, al menos, hay intereses o complicidades entre algunos sectores del Ejército o del Gobierno con alguno de estos grupos terroristas".

Por tanto, reiteró, si el Gobierno de Argelia "quiere que no haya dudas sobre la paternidad del horror y sobre su conducta para perseguirlo, debe autorizar de inmediato la entrada en el país de las asociaciones, la prensa internacional y la comisión".

Los miembros de esa delegación evalurían las masacres cometidas por los integristas pero también lo que se ha hecho "por parte del Gobierno", que comete "constantes abusos" y ha caído en una persecución de las libertades públicas "pavorosa".

No se puede olvidar, agregó, que "la condena más firme debe ser para los que masacran, pero que no se nos vaya la democracia, los derechos humanos y todo por la borda entrando en una lógica antiterrorista que sea una lógica antipoblación".

En último término, los ciudadanos están "secuestrados etre el terror de los integristas y el contraterror del Gobierno, que ha hipotecado todas las libertades públicas".

ESTRATEGIA DE PRESION

José María Mendiluce se congratuló por la ruptura de la "actitud pasiva" de Europa hacia Argelia que se ha iniciado tras las últimas matanzas pero precisó que no se trata de lanzar una operación militar, sino de acordar una estrategia de presion conjunta de toda la Unión Europea "para poner fin al horror".

A su juicio, el ascenso del integrismo en Argelia "no s ajeno a la corrupción y al desastre económico que ha provocado el régimen político argelino", ya que la inmensa mayoría de la población está en condiciones económicas "miserables" mientras las grandes empresas firman contratos "multimillonarios" cuyos beneficios no llegan al pueblo.

Las medidas de presión que pueda adoptar la comunidad internacional para frenar la situación dependerán de la actitud que mantenga el Gobierno argelino, "que hasta ahora sólo habla de soberanía nacional, lo que parece unpoco pretencioso cuando no controla la seguridad de sus ciudadanos". Esa negativa, recordó, "sólo ha conducido a un baño de sangre que continúa, a pesar de las promesas".

El eurodiputado explicó que la comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento Europeo está estudiando desde hace tiempo una resolución que se debatirá proximamente y con la que pretenden "ir más allá" que con las anteriomente aprobadas por la Cámara comunitaria condenando la violencia.

La idea es que la Comisión Europea promueva l suspensión de las negociaciones del acuerdo de asociación con Argelia hasta que el país no autorice, al menos, la entrada en el país de las asociaciones, la prensa extranjera y la comisión de encuesta, y garantice su libertad de movimientos.

(SERVIMEDIA)
10 Ene 1998
CLC