La asociación considera que en ese caso las ayudas "no llegarían al pueblo cubano, sino que irían a parar a las tiendas especiales para turistas y cuerpo diplomático, a las que no tienen acceso los ciudadanos".

Por ello, solicita del Gobierno español que "las ayudas humanitarias sean donadas a las iglesias y organizaciones no gubernamentales" para que éstas se encarguen directamente de hacer llegar las mismas al pueblo cubano.

Finalmente, pidenque el Gobierno español "haga una llamada de atención a los empresarios españoles que invierten en Cuba, para que retiren sus empresas de las que no tienen garantías jurídicas y se condicionen las mismas a cambio de la implantación de la democracia en Cuba".