Así lo aseveró Asescon en una nota de prensa donde explicó que “es previsible que el producto haya sido adquirido por los consumidores” ya que fue sometido a un control fronterizo el pasado 15 de septiembre y se procedió “a su liberación y posterior distribución a través de la cadena alimentaria”, notificándose los resultados de la analítica al Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos (Rasff) el 10 de octubre.

La asociación de consumidores señaló que les parece una cuestión “tremendamente grave” porque los controles no han evitado la venta a los consumidores e indicó que los pesticidas no autorizados son Clorpirifós, Clorfenapir y Diflubenzuron.

Desde Asescon pidieron inspecciones exhaustivas para sacar estos productos de la venta inmediatamente si están aún y lamentaron la falta de campañas informativas y la debida transparencia en cuanto a este asunto.