Gil-Robles hizo estas afirmacones durante las II Jornadas Asturianas de Salud Mental y Ley, que organiza el Principado de Asturias y el Consejo General del Poder Judicial.

En estas jornadas colaboran también el Tribunal Superior de Justicia de Asturias, la Audiencia Provincial de Oviedo y la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Asturias.

Según Gil-Robles, la red de salud mental en Asturias es pionera en la creación de una red alternativa a los hospitales psiquiátricos. "Desde 1986 se han tomado medidas, se tiene un arco normativo adecuado y se está trabajando con mucho esfuerzo por parte de las administraciones regionales y los responsables del Poder Judicial", dijo.

Gil-robles añadió que "hay situaciones en España en las que se ven carencias muy graves, sin embargo Asturias se lo está tomando muy en serio".

El Defensor del Pueblo señaló que ha pedido modificaciones en el Código Penal, ya recogidas en el proyecto, para que los enfermos mentales, que forman junto a los niños y enfermos los grupos más débiles puedan estar protegidos.

Alvaro Gil-Robles elaboró hace un año un informe sobre las redes de atención de salud mental en nuestro país. En su opinión, todavía no se ha definido con suficiente claridad la barrera entre delito y enfermedad, y aseguró que "todavía hay mucho que trabajar en esta materia".

A su juicio, todo lo que ha girado en torno al enfermo mental "encierra una gran dosis de hipocresía social, ya que no se ha querido reconocer que existe la enfermedad".

Añadió que hasta ahora e pensaba que "estos individuos no eran enfermos, sino un mueble que había que almacenar en un centro, y creo que afortunadamente estamos saliendo de un túnel del tiempo".