El desarrollo y puesta en marcha de esta fase del proyecto de receta electrónica de Muface, es fruto del trabajo conjunto con el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (Cgcof) y el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Asturias.

Las primeras mutualistas en hacer uso de la receta electrónica concertada fueron Ana Belén Toyo, adscrita a Adeslas; Lucía López, de Asisa, y África Cotillas, de DKV, el pasado viernes en una farmacia de Oviedo en presencia del director provincial de Muface, Ángel Colmeiro, de la presidenta del Colegio de Farmacéuticos de esta comunidad autónoma, Belén González-Villamil, y en representación de Adeslas, Pablo Canteli.

La directora general de Muface, Myriam Pallarés, señaló que la implantación de la receta electrónica concertada en Asturias es un “importantísimo beneficio” para todas las personas mutualistas adscritas a esta opción, y un motivo de orgullo para todos los que trabajan día a día en mejorar las condiciones de vida de este colectivo.

Asimismo, recalcó que uno de los objetivos prioritarios es extender “lo más pronto posible” este tipo de receta al resto de las comunidades autónomas. También agradeció a todos los responsables del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos, así como a los representantes de las tres entidades aseguradoras implicadas en el proyecto, “por su entrega y seriedad” en los trabajos que han permitido poner en marcha la receta electrónica concertada en el Principado.

Por su parte, la secretaria general del Cgcof, Raquel Martínez, manifestó que “el buen entendimiento y trabajo conjunto del Consejo General de Farmacéuticos y Muface, y la colaboración del Colegio de Farmacéuticos de Asturias, ha permitido que los beneficiarios de la mutua en Asturias puedan recoger su medicamento prescrito por este sistema en cualquier farmacia con las máximas garantías, gracias a las posibilidades que ofrece la receta electrónica como un ejemplo de la innovación aplicada a la prestación farmacéutica”.