Según refleja el informe, el 33% se mantiene hoy en día en el segmento del alquiler residencial o de larga duración, lo que representa una caída de cinco puntos porcentuales en comparación con 2021, cuando este porcentaje era de casi un 38%. En el otro extremo, el 67% restante ha retornado al alquiler vacacional.

En septiembre de 2020, la primera edición del estudio 'Impacto de la pandemia en el alquiler vacacional' revelaba que un 64% de los propietarios que tenían alguna vivienda destinada a alquiler vacacional en España se había pasado, como consecuencia de la covid-19, al alquiler residencial. En 2021, casi el 40% de los pisos turísticos se habían mantenido en alquiler residencial y en 2022 el volumen se reduce significativamente.

De los apartamentos turísticos que todavía se mantienen en régimen residencial, el 14% lo hace por un periodo limitado de tiempo (seis puntos menos que en 2021) y volverán al mercado turístico cuando la situación mejore, mientras que cerca del 20% de las viviendas turísticas se mantiene como alquiler residencial de forma indefinida, lo que supone dos puntos más respecto al año anterior.

Asimismo, del total de viviendas ofertadas en el mercado, el 2% las tienen alquilada para estancias cortas o vacaciones, mostrando una ligera reducción de 0,8 puntos respecto a los datos del 2021, mientras que un 12,2% destina su vivienda al alquiler de larga duración, cifra que sufrió un incremento de los 0,9 puntos porcentuales respecto al año anterior.

Por su parte, entre el segmento de las viviendas ofertadas en alquiler, el 8% de los arrendadores ha destinado el domicilio al alquiler vacacional, y el 26,1% la ofrece en régimen de alquiler de larga duración. En ambas situaciones, los datos muestran una ligera reducción respecto a las cifras del 2021. El resto proviene de inmuebles que eran viviendas habituales (34%), segundas residencias (12%), casas heredadas (9%) y viviendas vacías (7%).

Si se analiza el perfil del arrendador que opta por el alquiler vacacional en 2022, se observa que se trata de hombres y mujeres con una media de edad de 49 años, aunque aumenta ligeramente el porcentaje de mujeres que eligen esta modalidad con respecto al año anterior (46% frente al 43% en 2020).

En cuanto a la distribución territorial, los arrendadores de alquiler vacacional se sitúan de una forma muy localizada en Andalucía (24%) y este año aumenta la proporcionalidad en Cataluña (16% frente al 11% en 2021) y en la Comunidad Valenciana (13% frente al 9% en 2021). Sin embargo, en Madrid se detecta un descenso paulatino, pasando del 21% en 2020, al 14% en 2021 y al 12% en este 2022.

La directora de Estudios y Portavoz de Fotocasa, María Matos, subrayó que “la incertidumbre de cara a la temporada estival se ha disipado por completo y contemplando las previsiones de verano récord que está previsto que alcancemos, el volumen de alquiler vacacional se ha incrementado en cinco puntos porcentuales”.