"Estoy convencido", dijo, "de que la responsabilidad de todos va a hacer que el 98 sea el año del optimismo. Tenemos todos los condicionantes para aprovechar la oportunidad. Lo que conviene a España es mantener la estabilidad y dar un fuerte impulso al proceso de reformas y a la modernización".

Aznar insistió en su voluntad de agotar la legislatura y señaló que "ningún interés de partido puede estar por encima de la responsabilidad general. E incluyo también el mismo interés del Partido Popular. Esaresponsabilidad está dando frutos a la sociedad española".

En relación al terrorismo etarra, Aznar dijo que los militantes del PP en el País Vasco "saben que no están solos, pero no vamos a perder ninguna oportunidad para demostrárselo. Vamos a ganar a los terroristas. Y por duras que sean las circunstancias, siempre habrá un hombre y una mujer del PP dispuestos a defender la paz y la libertad".

Aznar se mostró convencido de que 1998 será "el año de la confianza en las posibilidades de España. Elaño de sentirnos en una España que puede afrontar el futuro sin complejos: una España descentralizada y que, al mismo tiempo, tiene un proyecto común, un futuro común, muchas ilusiones de todos, y retos que podemos conseguir. Cambiemos el sentido del 98: del desastre al optimismo del futuro".

A su juicio, hay cuatro factores de optimismo para el año que comienza: para cumplir Maastricht, para modernizar España, para reforzar el papel internacional y para avanzar en la sociedad del bienestar.

Finamente, Aznar tuvo palabras de ánimo para los militantes del PP de Cataluña, a quienes respaldo explícitamente por "su coherencia y sentido común". "Estoy seguro de que esa coherencia en vuestras actuaciones va a ser apreciada por los ciudadanos", indicó.