AZNAR VISITA OLONIA PARA DAR UN ESPALDARAZO AL "SI" EN EL REFERENDUM DE ADHESION A LA UE DE JUNIO
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El presidente del Gobierno, José María Aznar, inicia esta mañana una visita de trabajo a Polonia, en vísperas del referéndum de adhesión a la UE que va a celebrar este país en junio y cuando el Ejecutivo del primer ministro Leszek Miller, del SLD, no atraviesa su mejor momento.
Leszek Miller está en minoría dentro de un complicado panorama político en el que los partidos de izquiera, PiS y PO, no concretan su oposición en un proyecto conjunto y en el que pequeños partidos agrarios como el PSL, o antisistema, como el LPR, siguen renuentes a apoyar los ajustes económicos porque han visto frustradas gran parte de las reivindicaciones de dinero comunitario en las negociaciones de adhesión.
Aznar llegó anoche a Varsovia, pero hasta hoy a las diez de la mañana no inicia la visita propiamente dicha, en un encuentro con Leszek Miller seguido de rueda de prensa. Una posterior reunión co empresarios privados y almuerzo con el presidente de la república, Alexander Zwasniewsky, completan la agenda de un viaje relámpago.
Por la tarde, el jefe del Ejecutivo español viaja a Atenas para asistir junto con el resto de jefes de Estado y de gobierno de los Quince a la ceremonia de firma de la adhesión de Polonia y los otros ocho países aspirantes, pero quiere dejar constancia de su apoyo a Leszek Miller con esta escala en Varsovia.
El primer ministro polaco es, dentro del llamado grupo depaíses de Visegrado, que conforman los países aspirantes que firman mañana su adhesión, quien más está apostando por el vínculo trasatlántico con EE.UU. que defiende el Gobierno español. Incluso ha contribuído testimonialmente con 200 soldados a la coalición militar que ha atacado Iraq.
De ahí el gesto de Aznar en un momento en que su socio polaco está siendo cuestionado en la política interna por aspectos como las privatizaciones, que finalmente no van a deparar para las arcas públicas los 2.100 millnes de euros que esperaba el Ejecutivo, sino 1.700 millones.
Aunque el referéndum celebrado el pasado fin de semana en Hungría (83,8% dio el 'sí' a la adhesión) y los anteriormente llevados a cabo en Malta (53,5% de apoyo) y Eslovenia (89,61%) parecen indicar que las poblaciones de estos países aceptan ya como inevitable su ingreso en la UE, lo cierto es que la abstención en esos tres referéndum ha sido grande (55% en el húngaro) y eso puede desanimar aún más a una sociedad polaca en la que el componete agrario sigue siendo muy importante.
No en vano, la cumbre europea de Coopenhague, en diciembre pasado, estuvo centrada en buena medida en el ultimátum de los Quince sobre la cantidad que estaban dispuestos a poner sobre la mesa Los Quince para hacer posible la adhesión, 41.000 millones de euros. En ese reparto, Polonia se lleva algo menos de la mitad, por extensión y población agraria, pero a los partidos agrarios polacos, de fuerte implantación, les ha parecido poca cantidad.
Fuentes gubernaentales españolas prefieren destacar la creciente implicación de Polonia en los asuntos de la UE y en la cooperación con EE.UU. Se destaca que cuando los diez de Visegrado se integren en la UE, en la primavera de 2004, Polonia será uno de los países más importantes de la Unión.
(SERVIMEDIA)
15 Abr 2003
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