Entre los principales problemas pendientes destaca una “financiación insuficiente y no finalista” que, según la Fdasp, está en el origen de la mayoría de las otras carencias. Además, existe una "insuficiencia financiera crónica" que presenta una gran variabilidad entre las diferentes comunidades autónomas.

La Atención Primaria sigue en un "estado lamentable, con un deterioro muy importante y con graves problemas de accesibilidad". La demora media para las consultas se sitúa en 9,48 días, y un 27,2% de los pacientes reciben cita en 11 o más días, según datos del barómetro Sanitario de octubre de 2023.

Por ello, considera que las listas de espera son “muy elevadas en atención especializada”. Esta situación coexiste con una “continuada disminución” de las camas hospitalarias y con unos centros que no han recuperado la actividad asistencial previa a la pandemia.

Por otra parte, destaca que la privatización va "en aumento" en todas las comunidades autónomas y que el gasto farmacéutico "continúa disparado" y creciendo por encima de lo que lo hacen los presupuestos sanitarios.

La Fdasp denuncia la “ausencia de universalidad” del sistema sanitario. "La salud pública sigue infradotada y escasamente desarrollada. Además, la salud mental, la sexual y reproductiva, así como la salud laboral siguen siendo las grandes cenicientas del sistema sanitario público".

Otro problema es la "inexistencia" de mecanismos de participación social y profesional. Según la Federación, legislaciones "en principio positivas" como las referentes a la interrupción voluntaria del embarazo (IVE) o la eutanasia "tienen importantes problemas para su cumplimiento" en algunas comunidades autónomas.

No obstante, la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública prevé "mejores expectativas en 2024", aunque reconoce que habrá que esperar para comprobar "si se reflejan en los presupuestos" las promesas realizadas por la nueva titular del Ministerio de Sanidad, Mónica García.

Por último, desde la Fdasp anuncian que seguirán trabajando para que el derecho a la protección de la salud se convierta en una "realidad palpable", con el objetivo de lograr una sanidad pública "de calidad y suficientemente financiada".