Así lo recoge en su ‘Informe de Estabilidad Financiera’ correspondiente a otoño y publicado este jueves en el que analiza, entre otros aspectos, la situación del sector financiero español.

Valora que el sector mantuvo una “evolución favorable de su situación financiera” en el primer semestre del año, con una rentabilidad sobre el patrimonio neto (ROE) en “niveles elevados”, el 14,6%, y los resultados del tercer trimestre “continuaron en niveles elevados”.

Según el Banco de España, una parte del aumento de la rentabilidad se explica por efectos positivos “de carácter temporal o poco frecuentes” y cita la eliminación de ajustes por hiperinflación en el negocio en economías relevantes. Asimismo, señala que la pérdida de impulso del margen de intereses “configura un entorno menos expansivo de la rentabilidad en los próximos trimestres”.

El margen de intereses, que venía siendo el principal impulsor de la rentabilidad del sector, presentó en junio de 2025 un descenso interanual de cerca de 10 puntos básicos sobre el total de activos debido a la estabilización de los tipos oficiales. Este efecto negativo fue “más que compensado” por otras partidas como las comisiones netas.

Las pruebas de resistencia realizadas al sector a nivel europeo este verano muestran que el nivel de capital de la banca española “proporciona una capacidad de resistencia agregada notable frente a distintos escenarios adversos”, según valora el Banco de España, que insta a seguir monitorizando los riesgos.

Respecto al crédito bancario, el organismo detecta la recuperación de “cierto dinamismo” en un entorno de menores tipos de interés, pues el crédito a hogares y empresas no financieras residentes en España creció respectivamente un 3,1% y un 2,1% en los 12 meses transcurridos hasta junio de 2025. Desde finales de 2023, se venía observando una progresiva menor caída interanual del crédito real a hogares, empresas y autónomos en España. En los últimos trimestres, el crecimiento interanual del crédito real en España se ha intensificado y se ha situado en un nivel “mínimamente positivo” en junio. Además, desde marzo de 2025 ha superado al del conjunto del área del euro.

Por otro lado, el informe analiza la distribución geográfica y sectorial del crédito de los bancos españoles en el extranjero y concluye que su exposición está “razonablemente diversificada frente al impacto económico de los nuevos aranceles”.

En cuanto al sector financiero no bancario, el organismo insiste en que “no se detectan riesgos elevados” a escala doméstica, aunque el sector podría verse afectado por una potencial corrección abrupta de las valoraciones de los activos financieros.

Asimismo, señala como riesgo la concentración de las capitalizaciones bursátiles en grandes empresas tecnológicas de Estados Unidos, que presentan “valoraciones particularmente elevadas basadas en expectativas de crecimientos notables en sus beneficios” que “podrían no cumplirse”.