El propio FGD reconoció ayer que la obligación impuesta por un juzgado de Madrid de consignar 1.100 millones de euros por las posibles responsabilidades en el asunto del Banco de Valladolid supondría reducir sensiblemente sus reservas, lo que podría trasladarse a los consumidores, en caso de que hubiera alguna quiebra bancaria de importancia.

Fuentes de la patronal bancaria AEB descartaron que exista riesgo alguno para los ahorradores que, según explicaron, "confían en la solvencia de los bancos españoles".

"No hay mayor problema y el FGD siempre va a tener fondos para cubrir posibles anomalías, que no se van a producir", dijeron a Servimedia desde la AEB.

Mientras, fuentes del sistema bancario insistieron en el mismo mensaje y explicaron que, aun con 450 millones de euros de reservas, el FGD tiene capacidad para afrontar crisis bancarias que "no se van a producir", según explicaron.

Por ejemplo, la última crisis conocida, protagonizada por el Eurobank del Mediterráneo, costó al fondo unos 80 millones de euros, mientras que la más conocida, la de Banesto, supuso unos 1.100 millones.

En caso de que no hubiera fondos, la normativa establece que los bancos tendrían que realizar aportaciones especiales y también el Banco de España debería hacer su aportación, como ya sucedió en el pasado.

Finalmente, fuentes de las cajas de ahorros consultados por Servimedia destacaron que este asunto no afecta a los ahorradores de estas entidades, que tienen un fondo de garantía aparte que cuenta, actualmente, con 2.530 millones de euros.