Frutos afirmó que el objetivo de IU es "saber precisamente quienes utilizaron información privilegiada antes de la intervención y todo lo que sabe sobre la operación del Gobierno, porque no compartimos este secretismo que considero un frude".

"Me parece mal que haya habido accionistas -que además no van a ser pequeños accionistas sino con un cierto tronío- que han utilizado una situación (información) privilegiada para vender sus acciones en un momento determinado. Yo creo que se puede calificar de fraude", concluyó al respecto.

Croissier, según informó ayer Servimedia, no informará de la venta precipitada de acciones porque, por imperativo legal, la CNMV debe guardar la confidencialidad sobre quien o quienes efectuaron operacioes en la mañana del 28 de diciembre.