El margen de intermediación ascendió a 322.065 millones de euros, un 11,23% más, mientras que el margen ordinario creció un 20,43%, hasta 532.611 millones, y el de explotación se situó en 278.170 millones de euros, lo que supone un alza del 25,09%.

Los activos totales crecieron un 35,34%, alcanzando los 38.864 millones de euros, y los recursos de clientes dentro y fuera de balance arrojaron un saldo al cierre de septiembre de 33.954 millones de euros, un 18,85% más, destacando los fondos de inversión y los fondos de pensiones, con aumentos del 10,78% y el 28,85%, respectivamente.

Por lo que se refiere a la inversión crediticia, esta partida ascendió a 24.296 millones de euros, lo que supone elevar en un 28,21% la cifra presentada por este concepto en los nueve primeros meses de 2004.

Esto no perjudicó a la calidad del crédito de la entidad, que tiene un ratio de morosidad del 0,25% y ha mejorado hasta el 544,11% su índice de cobertura ante posibles insolvencias,

Las dotaciones genéricas crecieron en 25,6 millones de euros, en línea con el crecimiento de la inversión, lo que certifica un beneficio después de impuestos de 184,7 millones, un 28,4% más que al cierre de septiembre del pasado año.

Además, las comisiones repuntaron un 8,6% por la mayor venta cruzada en el segmento de clientes, así como al aumento de la actividad transaccional con pymes y empresas, junto con el crecimiento del negocio de fondos de inversión, de pensiones, seguros y de la intermediación de valores.

Por su parte, los costes experimentaron un alza del 15,7% y la plantilla creció en 3.612 empleados al cierre de septiembre, un 13,3% más interanual.