Según han informado a Servimedia fuentes d las compañías presentes en la reunión, Arias Salgado planteó a las empresas una doble alternativa: la más rápida sería usar la base de Torrejón en el plazo de 15 días; la otra, con más capacidad de operaciones pero más lenta, sería poner a disposición de las empresas civiles la base de Getafe el próximo verano.

Las compañías han reclamado al ministro que revise sus datos y vea la posibilidad de ampliar las operaciones de Barajas desde las 50 por hora que ahora se han fijado como tope a las 57 ó 58 qu ya se llegaron a hacer en el aeropuerto madrileño durante los meses de abril, mayo y junio sin problemas.

Tras el compromiso de Arias Salgado de ver esta posibilidad, las empresas asistentes de la reunión han aplazado cualquier decisión al resultado de una reunión que habrá esta semana, miércoles o jueves, con AENA, para conocer en qué condiciones habría que desviar aviones a alguno de los dos aeropuertos madrileños alternativos.

La disyuntiva planteada por el Ministerio está apoyada en los infomes técnicos que el ente público Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) encargó hace dos meses, y en los que se plantean los 'pros' y los 'contras' de ambas alternativas.

En el caso de Torrejón se apunta la posibilidad de iniciar las operaciones en 15 días, pero se advierte que sólo podría hacerse con aeronaves de muy pequeño tamaño y para un número muy limitado de 'aterrizajes y despegues' al día.

Sin embargo, para Getafe se apunta que la infraestructura que ya existe facilitaría un volmen superior de operaciones y con aparatos de más envergadura, aunque sólo sería posible a medio plazo y tras una inversión de acondicionamiento que se cifra entre 2.000 y 3.000 millones de pesetas.

El uso de un 'segundo aeropuerto' en Madrid viene forzado por el aumento de la demanda que va a generar la liberalización del sector el año que viene, y la necesidad de esperar dos años hasta que esté construida la tercera pista de Barajas.

AENA reconoce que las últimas medidas aplicadas a las compañís aéreas, para que cumplan estrictamente las normas de operación en el aeropuerto, no serán suficientes para atender el previsible incremento de la demanda de vuelos en Madrid, y se recuerda que la obra de la tercera pista, ya adjudicada, tardará dos años en concluirse.