Al defender en el pleno del Parlamento gallego una moción en contra del uso de fondos públicos para estos fines, la diputada del BNG Pilar García Negro acusó a los diputados del PP de promover desde las instituciones en las que gobierna actos denigrantes para la dignidad de las mujeres, y llegó a calificar estos concursos como "prostitución encubierta".

Las críticas más duras se centraron en el caso de la Diputación de Lugo, presidida por el senador del PP Francisco Cacharro, y en el departamento de Snidad y Servicios Sociales de la Xunta, que dirige José Manuel Romay. El primero patrocinó concursos de "misses" en varias ocasiones desde la institución provincial, con una política que la diputada del BNG consideró "sexista y prostituidora".

Las críticas de la diputada se cebaron también en Romay, titular del departamento de Servicios Sociales, que este año financiará por sexto año consecutivo actividades para la tercra edad entre las que hay un concurso para mujeres de más de 60 años de los diferenes residencias públicas, con premios como "miss fotogenia", "miss elegancia" o "miss marchosa". Esto, a juicio de García Negro, es "promover la degradación y vejación con fondos públicos".

El PSdeG-PSOE respaldó una propuesta en la que el BNG apostaba por reclamar acciones de la Xunta en contra de estos eventos patrocinados desde instituciones. El PP votó en contra de la propuesta, después de que el portavoz del grupo, José Oreiro, estimara que los prejuicios de la diputada del BNG eran más humillante que los supuestos actos que pretendía descalificar.

"Apostamos por la tolerancia" dijo José Oreiro, y sobre los concursos de misses para ancianas consideró que suponen una buena forma de promover la participación de la tercera edad e incluso los comparó con los juegos olímpicos para discapacitados.