Esos son algunos datos meteorológicos significativos del episodio invernal de esta recta final de febrero, motivado por la combinación de la borrasca profunda mediterránea Juliette y la entrada de una masa de aire de origen ártico, es decir, cerca del Polo Norte.

Así, la nieve apareció este lunes en zonas costeras del Cantábrico, como San Sebastián, además del Mediterráneo. Barcelona vivió “la nevada más intensa desde marzo de 2018. Y en la costa de Tarragona, la última nevada hay que remontarse también al año 2018 para encontrarla”, según Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

También fueron destacables las nevadas aparecidas en Baleares, puesto que nevó a apenas 100 metros de altitud y en algunos puntos del norte de Mallorca se acumularon espesores superiores a un metro a unos 800 metros.

Además, la madrugada de este martes fue gélida en muchas zonas de España. Molina de Aragón tuvo una temperatura mínima de -15,8 grados, esto es, 13 grados menos de lo normal para esta época del año.

Los termómetros también marcaron valores muy bajos en Sierra Nevada (Granada), con -15,2 grados, y zonas pobladas como Calamocha (Teruel), con -11,8 grados, y Daroca (Zaragoza), con 10,7 grados, según datos de la Aemet recogidos por Servimedia.

“En el resto de zonas pobladas del país, las temperaturas mínimas esta madrugada del martes han oscilado entre cuatro y siete grados por debajo de lo habitual. Por lo tanto, ha sido una noche muy fría para encontrarnos ya a las puertas de la primavera meteorológica”, apuntó Del Campo.

Esta madrugada también fue destacable el viento en Baleares, con rachas huracanadas de 122 km/h en Capdepera (este de Mallorca), y en el interior peninsular, con 105 km/h en el Alto del León (Madrid).

MARTES

Este martes continuará la situación adversa en Baleares, pues seguirá nevando en el norte de Mallorca, aunque la cota de nieve subirá hasta unos 900 o 1.000 metros. A menor altitud lloverá con intensidad y quizá con granizo.

El viento también soplará con fuerza en Baleares, puesto que habrá rachas de más de 90 km/h, mientras que hay aviso rojo -riesgo extremo para actividades al aire libre- por olas de más de ocho metros en Mallorca (Sierra de Tramontana, norte y nordeste).

En la península, será destacable el viento fuerte en el nordeste y las nevadas en cotas muy bajas del tercio norte, con acumulaciones de nieve de dos a cinco centímetros o puntualmente más a partir de unos 400 o 500 metros en las comunidades cantábricas, el norte de Castilla y León, Navarra y La Rioja.

Las temperaturas ascenderán en muchas zonas, especialmente en el este de la península. No obstante, los termómetros apenas pasarán de seis a ocho grados en muchos puntos del norte.

MIÉRCOLES

Este miércoles comienza marzo y también la primavera meteorológica. Lo hará con frío porque las temperaturas mínimas serán inferiores a - 8 o -10 grados en zonas de montaña y probablemente también en páramos del interior. Podrían alcanzarse estos valores en zonas pobladas si los cielos quedan poco nubosos, el viento calma y hay nieve en el suelo.

De todas formas, las heladas serán generalizadas de madrugada en el interior peninsular, “algo poco frecuente ya para comienzos de marzo”, según Del Campo. De hecho, estarán entre 5 y 10 grados por debajo de lo habitual para la época en la mayor parte de la península.

Las temperaturas máximas también serán frías, incluso podrían bajar un poco en la zona centro. Pocas áreas de la mitad norte superarán los 8 o 10 grados.

Nevará a partir de unos 200 metros -puntualmente incluso por debajo- en el este de Galicia, interior de Asturias, interior de Cantabria y norte de Castilla y León, y no se descarta alguna nevada en cotas bajas de País Vasco y norte de Navarra. También puede aparecer algún chubasco en el área levantina y en Baleares, con una cota de nieve que de 500 o 600 metros en el archipiélago.

A PARTIR DEL JUEVES

La madrugada de este jueves será de nuevo muy fría, con valores similares a los del miércoles, aunque las temperaturas subirán. “Poco a poco irán recuperando los valores normales para la época, de modo que de cara al fin de semana ya podemos considerar que estarán en torno a lo normal para para la fecha”, precisó Del Campo.

Sin embargo, las temperaturas nocturnas continuarán bajas, con heladas que, aunque irán perdiendo intensidad, se seguirán produciendo en amplias zonas del interior y serán todavía fuertes en zonas de montaña.

Por lo tanto, las madrugadas tendrán entre 5 a 10 grados por debajo de lo normal en zonas del centro y norte de la península, una tónica que se mantendrá toda la semana.

“Habrá una gran amplitud térmica entre la temperatura de la noche y el día. Puede haber diferencias entre las temperaturas nocturnas y las diurnas de cara al fin de semana, superiores a los 20 grados en zonas de Castilla y León, de Castilla-La Mancha y Aragón, fundamentalmente”, apostilló Del Campo.

A partir de este jueves apenas se esperan precipitaciones, como mucho alguna lluvia débil en el Cantábrico oriental y algún chubasco aislado en Baleares y otras zonas mediterráneas. La cota de nieve seguirá baja el jueves y el viernes -en torno a unos 500 metros-, aunque con menos zonas afectadas. Por último, Canarias tendrá tiempo estable en estos primeros días de marzo, según Del Campo.