Borrell, que mantuvo hoy una reunión de más de tres horas con el Consejo Asesor de las Telecomunicaciones, señaló tras el encuentro que la propuesta está abierta a moificaciones, pero que, en cualquier caso, si se aceptase, habría de cumplir con el requisito "imprescindible para el Gobierno" de reestructurar las tarifas de Telefónica antes de proceder a la liberalización del servicio básico, que según el ministro no se hará antes de 1998.

El ministro señaló que ningún miembro del Consejo Asesor, en el que están presentes todos los agentes implicados en el negocio de las telecomunicaciones (las tres administraciones, los sindicatos, los empresarios, los consumidore y expertos del sector), se ha pronunciado en contra de aguantar la liberalización hasta 1998, por lo que el ministerio mantiene este criterio y dará los pasos necesarios para no alargar ese proceso hasta el año 2002, aunque lo permita la directiva de la Unión Europea.

Según la propuesta tarifaria explicada por Borrell, el aumento de las tarifas urbanas y la reducción de las demás permite revisar su estructura sin dañar la cuenta de resultados de Telefónica, ya que la subida de 5 pesetas en una área d actividad que concentra más del 50 por cien de las comunicaciones básicas de voz, cubre la fuerte bajada de interurbanas, nacionales e internacionales, en las que la compañía concentra el grueso de su negocio.

Las cinco pesetas de aumento por los tres minutos (4,35 sin el IVA del 13 por cien) equivalen al precio actual de un paso, y suponen un aumento del 49,8 por cien respecto a su coste actual para el consumidor.

Borrell insistió en que estas variaciones no alteran el objetivo del Gobierno de ue la subida media de las tarifas del teléfono aumenten cada año, hasta 1997, por debajo de la inflación prevista. En 1994 el crecimiento medio se quedaría en el 1,6 por cien (IPC menos 1,9 puntos), mientras que para 1995 estaría en el IPC menos 2,5 puntos, en 1996 IPC menos 3,1, y en 1997 IPC menos 3,7.

TMA: EVITAR EL ERROR DE IBERIA

Este marco de crecimiento estable de las tarifas debe ser consensuado con el Ministerio de Economía, como también debe concretarse en los próximos meses el crecimientoque, con toda seguridad, según el ministro, deberá realizarse en los servicios de telefonía móvil (TMA), antes de que entre en funcionamiento un segundo operador.

El motivo de esta decisión, señaló, es que deben quedar limitados los márgenes de competencia en precios en los que se va a quedar un sector determinado. "Creo que Iberia cometió un error al no revisar a la baja sus tarifas inmediatamente después de la liberalización, y este es un error que no me gustaría que se repitiera en este caso".

Asimismo, señaló que sigue abierta la posibilidad de adjudicar la licencia a un segundo operador de TMA, tanto por subasta como por méritos, lo que supone un paso antrás de Borrell, ante las presiones de los licitantes al concurso para evitar agravios con Telefónica.

TV POR CABLE

Respecto a la regulación de la futura Ley de Televisión por Cable, Borrell insistió en que el Gobierno limitará esta norma a los servicios de televisión, y concretó que el borrador de su departamento contempla la legalizacin de quienes ya operan en el sector, por entender que su aspiración es ésta y no crear infraestructuras de banda ancha para negocios futuros.

También explicó que Telefónica podrá utilizar la red básica para transmitir televisión, en la medida de sus posibilidades técnicas, y que en cada demarcación geográfica habrá un concurso para adjudicar una sóla licencia que competirá con Telefónica (duopolio).

Además, la comunidades autónomas recibirán la competencia de adjudicación de licencias a los operaores que no dispongan de una red propia, mientras que el ministerio se reserva los permisos para los grandes operadores, los que opten a la TV por cable con redes propias.

El Consejo Asesor de Telecomunicaciones volverá a reunirse el próximo día 28, ya que aún quedan pendientes todos los temas de mayor transcendencia que tenían previsto estudiar hoy y sobre los que no han llegado a ningún acuerdo.

Entre estas cuestiones destacan la reestructuración de las tarifas telefónicas, las condiciones parala concesión de un segundo operador de telefonía móvil y las condiciones para la adjudicación de licencias en televisión por cable.