La denuncia, presentada en los juzgados de la Plaza de Castilla de Madrid, señala que, durante el intercambio de información y documentación, las cuentas de correo electrónico del abogado penalista y del asesor fiscalista recibieron un correo del novio de Ayuso a las 11.39 horas de la mañana, que fue respondido a las 12.11 horas.

“Unas horas después de haberse recibido y respondido el correo”, ambos mensajes desaparecieron de los sistemas informáticos para, “transcurridas unas seis horas", volver a reaparecer en los sistemas ya el día 3 de abril, a las 00.09 horas, según la denuncia.

Tras percatarse de estos hechos, el bufete que asesora a Alberto González los puso en conocimiento de un perito informático que, tras analizar preliminarmente los sistemas, determinó que había sido objeto de un ciberataque.

Este hackeo, según expone el escrito, habría afectado a los correos mencionados del día 2 de abril de 2024 –“no teniendo transcendencia al resto de correos ni buzones corporativos” – y “habría consistido en retirar la información (los correos electrónicos) de los sistemas (presumiblemente para su descarga y/o extracción de ficheros adjuntos con cientos de páginas) y posteriormente volver a ser entregados al buzón de correo de los usuarios, no levantando de esta manera sospechas sobre las actuaciones realizadas”.

La defensa del novio de Ayuso denuncia así que se ha producido un delito de revelación de secretos, así como una vulneración del derecho de Alberto González a la intimidad y a la protección de sus datos personales. Y así se lo ha trasladado al juez, con el que se compromete a aportar el informe pericial con toda la información disponible en los próximos días.

Entre esa información, estará el diagnóstico de Microsoft, que, según la defensa del novio de Ayuso, ha comunicado que este tipo de técnicas son “comúnmente utilizadas” cuando un tercero quiere acceder a determinada información “hackeando un sistema y dejando el mínimo rastro técnico posible del acceso”.