Venezuela

Bustinduy cree que lo que “corresponde” al Gobierno ante la “extraordinariamente profunda” crisis en Venezuela es ser “prudente”

-Vuelve a pedir la publicación de las actas electorales ante las “profundas sospechas” sobre la “legitimidad” de los resultados

MADRID
SERVIMEDIA

El ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, experto en política internacional, defendió este jueves que lo que “corresponde” a un gobierno de España ante la “extraordinariamente profunda” crisis en Venezuela es “una postura prudente de diálogo, mediación y apaciguamiento” y evitó reconocer a Edmundo González como presidente legítimo del país caribeño a la espera de que se publiquen las actas electorales y ante las “profundas sospechas” sobre la “legitimidad” de los resultados.

Así lo afirmó en el transcurso de una entrevista en RNE recogida por Servimedia y en la que dijo “dudar” de la “eficacia” y de los “efectos” que han tenido para “resolver o apaciguar” una “extraordinariamente profunda crisis diplomática y política en Venezuela, institucional y en el marco de las relaciones internacionales” las declaraciones de la ministra de Defensa, Margarita Robles; el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell o el presidente de Chile, Gabriel Boric, tachando de dictadura al régimen de Maduro.

Por el contrario, valoró la posición “prudente y razonable” del ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, que es, a su juicio, “buscar, en una situación de profunda crisis, fórmulas y mecanismos de mediación, diálogo, apaciguamiento", para "intentar resolver" una "situación que es extraordinariamente preocupante”. “Con lo cual, yo creo que esa es la posición que un gobierno, de manera responsable, debe tener ante un caso como este”, sentenció.

Preguntado por si reconoce a Edmundo González como presidente legítimo de Venezuela, recordó que la postura del Ejecutivo español es que “deben publicarse las actas electorales” ante las “profundas sospechas sobre la limpieza o la legitimidad del resultado electoral que se proclamó”. “No son elucubraciones, es la posición que han mantenido los observadores internacionales que fueron a esas elecciones”, abundó, al tiempo que reiteró que, “mientras no se aclaren esas dudas, evidentemente, estas elecciones no pueden ser reconocidas”, dado que “los elementos de sospecha son profundos”.

Con todo, hizo hincapié en que lo sucedido con estos comicios es la “expresión” de una “crisis institucional, política, económica, continental” y estimó “sensato” que sean países de la región como México, Brasil, Colombia los que estén “abanderando las iniciativas para esto”, puesto que son, además, “quienes más sufren las consecuencias de la inestabilidad política en Venezuela”.

DIÁLOGO, MEDIACIÓN Y APACIGUAMIENTO

En este contexto, aseveró que, “lo que le corresponde a un país como España, que tiene cientos de miles de españoles viviendo allí y cientos de miles de venezolanos viviendo aquí, muchísimos intereses comerciales y estratégicos” y a su gobierno es adoptar “una postura prudente de diálogo, de mediación y de apaciguamiento”.

En este punto, se preguntó “a quién le conviene escalar esta crisis”, convencido de que “en España, todo el mundo que lo vea lo tiene bien claro”, en referencia a una derecha que, según el ministro, “lleva 10 años instrumentalizando esta situación no para contribuir a resolverla, sino para intentar obtener réditos políticos y beneficios a corto plazo”.

“Y eso creo que es una irresponsabilidad en política exterior, que es algo que es una materia de Estado, que llama a la responsabilidad”, advirtió, para lamentar que Venezuela “arrastra” una “larga década” de “conflictos sociales, institucionales, políticos y una gravísima crisis económica” que, a su entender, “no es algo nuevo, pero es una fuente de gravísima preocupación en la región”.

(SERVIMEDIA)
19 Sep 2024
MJR/gja