El volumen de negocio gestionado por esta Caja y su grupo consolidado experimentó un alza del 22,5%, hasta alcanzar al cierre del pasado junio, una cifra de 24.745 millones de euros.

Las inversiones crediticias alcanzaron un saldo de 10.466 millones, un 33% más que en la primera mitad de 2004, con unos recursos de clientes administrados de 14.279 millones, lo que supone un repunte del 15,8%.

La apertura de 14 puntos de negocio durante la primera mitad del año ha contribuido a conseguir la mejora de la actividad financiera y comercial, dentro de un plan de expansión que prevé la creación de 123 nuevas oficinas durante los ejercicios 2005 y 2006. Los importantes incrementos de los riesgos crediticios no han llevado aparejados crecimientos en la morosidad, ya que la tasa de impagos se ha situado en el 0,61% al cierre del pasado junio.