En un comunicado, la entidad financiera explica que este grupo de asesores se va a dedicar a buscar soluciones personalizadas para cada cliente, aplicando la máxima flexibilidad y partiendo de la base de que los clientes no pagan porque no pueden y no porque no quieren.

La nueva unidad está haciendo un estudio de la base de clientes de la entidad para identificar aquellos que presentan un perfil de riesgo de su situación financiera futura. De esta forma, Caja Navarra quiere adelantarse a los problemas para poner soluciones antes de que se presenten.

En la mayoría de los casos, se estudia una consolidación de préstamos, ya que el comportamiento habitual es que los clientes hayan intentado solucionar su situación con otras financiaciones, que a medio plazo sólo complican su capacidad de pago.

Para consolidar el préstamo vivienda con otras financiaciones, Caja Navarra aplicará uno o varios instrumentos financieros. Entre ellos, el alargamiento de los plazos es el más beneficioso para el cliente porque es con el que paga menos intereses. También puede optar por parar la amortización de su préstamo y pagar sólo intereses durante dos años.

Además, ha diseñado un nuevo instrumento financiero, los "balloons", que consisten en el aplazamiento de un porcentaje del préstamo principal al final de periodo, como última cuota.