Por esta razón, uno de los puntos a tratar en la III Conferencia Ministerial sobre Mdio Ambiente y Salud, que se celebrará en el próximo mes de junio y en la que participarán 51 Estados miembros de la OMS, será el establecimiento de medidas que minimicen los efectos del cambio climático y el debilitamiento de la capa del ozono, por parte de los responsables de salud de los distintos países.

Entre los efectos que este fenómeno ya está teniendo sobre la población mundial, la OMS ha destacado el aumento de cáncer de piel (debido a la exposición a rayos ultravioletas); los problemas de slud por las cada vez más numerosas olas de calor; el incremento de enfermedades infecciosas, como la malaria, el cólera y las fiebres producidas por picaduras de mosquitos, y las muertes causadas por las inundaciones, tormentas, huracanes y otros fenómenos atmosféricos.