Las cancelaciones registrales muestran un auge en marzo al marcar cifra récord desde mayo de 2008, cuando se cancelaron 44.744 préstamos, en pleno estallido de la burbuja inmobiliaria.

Además, el pasado mes de marzo las cancelaciones aumentaron un 20,4% respecto al mes anterior. Se trata del mayor incremento intermensual desde marzo de 2021, cuando crecieron un 26,9%, en un momento en el que los tipos de interés encarecen las hipotecas.

De hecho, según los datos del INE, el tipo medio de los nuevos préstamos para la compra de vivienda subió hasta el 2,99%, frente al 2,86% de febrero, y las hipotecas que han registrado cambios en sus condiciones de tipo de interés han resultado en un aumento de las referenciadas a tipo fijo, del 13% al 40,2%, y un descenso de las variables, del 85,6% al 58%, respecto a marzo de 2022. Cabe recordar que el Banco Central Europeo (BCE) empezó a subir los tipos de interés en julio del año pasado.

Las cancelaciones registrales de préstamos para vivienda han superado después de 2008 la cifra de las 40.000 en dos ocasiones: el pasado mes de marzo y en marzo de 2022 (42.763). En los tres primeros meses de este año acumulan 114.728 operaciones, por encima de las 104.415 del mismo periodo del año anterior.

Por otra parte, si se compara con las nuevas firmas de hipotecas, ya son dos meses consecutivos en los que las cancelaciones superan a las nuevas operaciones. En concreto, en febrero y marzo se firmaron 35.900 y 36.182 préstamos y se cancelaron 36.695 y 44.171. Cabe resaltar que desde abril de 2021 no se producía esta situación.

El Banco de España ya ha avisado de que el crédito ha empezado a contraerse y los criterios de concesión se han endurecido al tiempo que la demanda por parte de las familias ha descendido.

Las principales entidades a título particular también han admitido ese freno, que muestra el INE con el dato del descenso interanual del 15,7% en la firma de hipotecas en marzo, al tiempo que observan que las amortizaciones de estos préstamos se aceleran.