Los dos estudios europeos (uno británico y otro italiano), publicaos en el último número de la revista "The Lancet", no han encontrado pruebas de que el Tamoxifeno prevenga el cáncer de pecho. Estos trabajos científicos se realizaron entre 7.900 mujeres con antecedentes familiares. La conclusión fue que la enfermedad afectaba por igual tanto a las mujeres que tomaron el fármaco como a las que no lo hicieron.

En cambio, un estudio del Instituto Nacional del Cáncer, en Estados Unidos, publicado en abril, aseguraba que las mujeres que ingerían Tamoxifeno reducían en un45 por ciento el riesgo de desarrollar cáncer de pecho.

"Un gran número de mujeres han pedido tomar Tamoxifeno desde que apareció el estudio americano, pero yo estoy preocupado por la extensión de su uso entre las mujeres sanas", ha asegurado el doctor Trevor Powles, responsable del estudio británico. Este ha explicado que el fármaco puede tiene efectos secundarios, incluído un alto riesgo de desarrollar cáncer de útero y coágulos sanguíneos en los pulmones.

No obstante, lo que Powles afirma en s trabajo es que no hay pruebas evidentes de que el Tamoxifeno prevenga el cáncer, pero no que éste sea ineficaz.

Por su parte, los especialistas americanos Harmon Eyre, de la Sociedad Americana de Cáncer, y Larry Norton, del Hospital Kettering de Nueva York, han asegurado que los trabajos europeos son incompletos y engañosos. Además, pueden desorientar a las mujeres e impedir que se beneficien del fármaco.

El cáncer de mama es una de las primeras causas de mortalidad entre la población femenina. l Tamoxifeno bloquea el efecto del estrógeno y retrasa el crecimiento de las células cancerosas dependientes de la hormona. Los científicos están de acuerdo sobre su eficacia en las mujeres que han desarrollado la enfermedad, sin embargo, las discrepancias surgen en torno a si puede prevenir el cáncer en las mujeres sanas.