En un comunicado, la organización católica movilizó a sus equipos médicos en Gaza para entregar leche de fórmula a familias con recién nacidos y niños pequeños que habían carecido de nutrición básica durante los meses de conflicto. "La distribución se llevó a cabo a través de la red de puntos médicos de Cáritas en Gaza, garantizando que la ayuda llegara a las comunidades más vulnerables de forma rápida y segura", precisó la entidad.

Según Cáritas, la guerra y el bloqueo "restringieron gravemente" el acceso a suministros esenciales, dejando a miles de bebés desnutridos y a madres con dificultades para alimentar a sus hijos. Por lo tanto, el suministro inmediato de leche de fórmula fue una intervención "crucial" para salvar vidas, "devolviendo la esperanza y la estabilidad a familias que habían soportado penurias inimaginables".

“Esta acción refleja nuestra misión y compromiso con la dignidad humana”, declaró el secretario General de Cáritas Jerusalén, Anton Asfar. “Desde el primer día después de la guerra, nuestros equipos han trabajado incansablemente para apoyar a la población de Gaza, especialmente a los más vulnerables: niños, madres y ancianos. Entregar leche de fórmula no solo se trataba de comida, sino de devolver la vida y la esperanza”, añadió.

Los equipos médicos de Cáritas Jerusalén continúan operando en el sur de Gaza, brindando atención primaria de salud, apoyo psicosocial y ayuda de emergencia a las familias desplazadas y afectadas. La organización también aseguró que mantiene una "estrecha coordinación" con las instituciones sanitarias locales y las iglesias aliadas para garantizar el flujo continuo de asistencia humanitaria a través de corredores seguros y accesibles.