Almeida introdujo a Carvajal antes de su discurso tirando de humor y sacando a relucir las diferencias entre ambos: “No sé si os suena el pregonero. A mi que soy de la otra acera me suena bastante”. En cualquier caso, también recordó que fue quien marcó en la Eurocopa para que la selección española ganara el torneo.

Carvajal empezó su discurso afirmando que pronunciaba el pregón no como deportista sino como un “madrileño más”, un madrileño nacido en Leganés. “No importa, en Madrid uno no tiene que haber nacido para sentirse madrileño, te haces madrileño con las ganas, no te preguntan de dónde vienes, sino a dónde vas, y cuando lo entiendes forma parte de algo que ya no se va”.

Recordó que cuando recibió la propuesta pasaba por un mal momento debido a una lesión porque cuando se vive del deporte quedarse parado es “desaparecer” y esta propuesta “llegó como un chute”, como si Madrid le dijera: “No te preocupes, aquí estamos y vamos contigo”. Tras esto, como Almeida, señaló sus diferencias futbolistas con el alcalde.

“Quiero agradecerle al alcalde este gesto aunque tengamos gustos muy distintos me pareció que es un gesto que habla de algo muy bonito, que aquí en Madrid quien no piensa igual o tienen gustos diferentes no importa, porque por encima de todas las diferencias está Madrid”, reflexionó.

Insistió en que “no es solo una ciudad, es una actitud, un estado de ánimo, es ese contraste entre la prisa y la calma, entre el ruido del tráfico y la conversación tranquila en una terraza, un paseo por El Retiro, una caña bien tirada, un plan cualquier día a cualquier hora, es alguien que viene de fuera y se queda”.

El futbolista también habló de lo que supone vestir la camiseta del Real Madrid y de representar a la ciudad, con “ambición , historia e inconformismo”. Hacia el final, celebró qué “Madrid es la fuerza de seguir adelante cuando todo se pone cuesta arriba” y valoró el gran futuro de la ciudad. “Estamos en boca de todos, estamos de moda, es el resultado de años de esfuerzo, pero lo mejor es que aún no hemos tocado techo, nos espera un futuro brillante, nosotros sus vecinos somos los encargados de seguir haciéndola crecer”. Terminó con una frase “de todos, que nunca pierde esa fuerza”. “De Madrid al cielo”.