CASI 3.000 MILLONES DE PERSONAS EN EL MUNDO CARECEN DE AGUA POTABLE

MADRID
SERVIMEDIA

Más e 1.000 millones de personas carecen de abastecimiento de agua y 1.700 la consumen sin un saneamiento adecuado y en dudosas condiciones de potabilidad, según revela un informe de Manos Unidas sobre "Consumo, desarrollo y medio ambiente".

El reparto desigual del recurso, el despilfarro en algunas zonas del planeta (en los países industrializados la media de consumo por persona para uso doméstico es de 350 litros diarios y en el Tercer Mundo oscila entre 2 y 5 litros) y la contaminación agravan la escasz de agua que sufren algunas zonas del mundo.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que un tercio de las muertes en todo el mundo se debe a la ingestión de agua contaminada y que la mitad de la población mundial está expuesta a enfermedades derivadas del consumo de agua no adecuada, como cólera, tifus, amebiosis o esquistosomiasis, además de las muertes por falta de agua.

Unos 3 millones de niños mueren cada año como consecuencia de los efectos de la diarrea y alrededor de 200 millonesde personas sufren esquistosomiasis por tener la piel en contacto continuado con aguas contaminadas.

El informe señala que las principales causas de la contaminación de las aguas dulces son la negligencia en el uso, los vertidos tóxicos y la falta de instalaciones de saneamiento adecuadas.

A pesar del escaso nivel de industrialización de los países del Tercer Mundo (los ríos asiáticos son los más contaminados del mundo), sus ríos no escapan a la contaminación, motivada por unos sistemas de produción agrícolas basados en el uso indiscriminado de pesticidas tóxicos.

En los industrializados, a los insectidas se unen hábitos domésticos tan lesivos como el uso de detergentes con fosfatos que, como indica gráficamente el documento de Manos Unidas, "dejan blancos hasta los esqueletos de los peces".

El informe también denuncia el impacto negativo que acarrean la grandes presas que a menudo se contruyen en los países en vías de desarrollo con el pretexto de combatir la pobreza. Muchos de estos maroproyectos están financiados por el Banco Mundial.

"Sin embargo", asegura, "las presas se han revelado bastante negativas para los países para cuyo beneficio teóricamente se construían".

Estos grandes embalses inundan grandes extensiones de terreno, destruyen ecosistemas y provocan grandes desplazamientos de población que se queda así sin medios de vida.

(SERVIMEDIA)
16 Oct 1994
GJA