Bono, que entregó al presidente de la organización Médicos Sin Fronteras, José Bargas, un cheque de 42 millones de pesetas para ayuda a Ruanda, no quiso precisar la cuantía que se destinará al Tercer Mundo hasta que no se cierre el presupuesto de 1995.

El presidente castellano-manchego se mostró partidario de "hecer campaña para concienciar a los países con buen nivel de vida de la necesidad de destinar el 0,7 por ciento de sus presupuestos a otras pates del planeta sin recursos".

Bono pidió comprensión a aquellos ciudadanos que se opongan a esta medida alegando que "de alguna forma estamos obligados a dar esta cantidad de lo que nos gastamos para aquella gente que vive peor".

El presidente regional añadió que "la solidaridad es dar lo que se tiene, no sólo predicar que den otros lo que no nos corresponde a nosotros, y por ello tenemos que dar ejemplo".

Por su parte el presidente de Médicos Sin Fronteras, José Bargas, agradeció a la socidad castellano-manchega la aportación económica para Ruanda y resaltó la solidaridad del pueblo español con la población ruandesa.

Bargas confirmó que la organización que preside ha recaudado en España más de 1.200 millones de pesetas en donativos particulares para ayudar al pueblo ruandés.