CCOO recordó que, en todo el proceso de negociación, trasladó al Ministerio propuestas para que la jubilación parcial quedase garantizada, como una moratoria en la entrada en vigor de la nueva normativa para el personal laboral de la AGE hasta la aprobación de ofertas de empleo pendientes o complementarias, para garantizar un mayor número de aspirantes aprobados que plazas aprobadas en la oferta.

Sin embargo, todas estas sugerencias fueron rechazadas por la Administración, según el comunicado del sindicato.

En opinión de CCOO, las 1.000 nuevas plazas que quiere aprobar Función Pública para cubrir los contratos de relevo no van acompañadas de un crédito presupuestario extraordinario.

“Tememos que se financie amortizando más empleo público, lo que repercutirá negativamente en la prestación de los servicios públicos, y las consecuencias las pagará la ciudadanía con una peor atención”, lamentó la organización en su comunicado.

También señalaron que el acuerdo firmado entre Función Pública UGT y CSIF no contempla un calendario preciso que garantice el acceso a la jubilación parcial al millar de personas trabajadoras interesadas. El sindicato exigió que se concrete una fecha de resolución de estos procesos selectivos vinculados a la tasa específica de jubilaciones parciales, puesto que el plazo medio de ejecución viene durando varios años.

CCOO incidió en que en el acuerdo se veta al personal laboral fijo con mayor antigüedad y experiencia, que no podrá optar a las plazas comprometidas en la tasa de reposición específica para cubrir la jubilación parcial, por lo que personal de nuevo ingreso sin ninguna formación y experiencia ocupará preferentemente puestos de responsabilidad, lo que incumple el IV Convenio Único regulador de las condiciones laborales del personal laboral en la AGE.

CCOO quedó fuera del acuerdo entre el Ministerio, CSIF y UGT porque “no garantiza la jubilación parcial, debilita los servicios públicos y desprecia la experiencia acumulada en la Administración”.

El sindicato exigió al Ministerio que dirige Oscar López que “deje de hacer propaganda y presente un modelo de jubilación realista, financiado y dotado de plazos y garantías”.