Según el sindicato, el Gobierno regional parece atender "con mayor desvelo al interés del negocio inmobiliario que al de los ciudadanos madrileños, poniendo en peligro la sostenibilidad de la región en cuestiones tan graves como el consumo irracional de agua".

Para CCOO, la propuesta está inspirada en el urbanismo valenciano, que ha sido denunciado por Bruselas, y supone llevar hasta sus últimas consecuencias la "nefasta y ultraliberal" Ley 6/98 de Régimen del Suelo y Valoraciones puesta en marcha por el Gobierno de Aznar, que "tantos procesos especulativos ha desatado en España".

"Existe un auténtico clamor social en contra del anteproyecto de Ley de Suelo de Esperanza Aguirre. El Grupo Sindical del Consejo Económico y Social, el Colegio de Arquitectos de Madrid, las principales organizaciones ecologistas y sociales y la comunidad científica han expresado su frontal rechazo y han alertado sobre sus irreversibles consecuencias medioambientales y territoriales", advierten desde el sindicato.