El detonante para convocar esta movilización fue la muerte de cuatro trabajadores por el derrumbe de un edificio en la calle Hileras, también en la capital, la semana pasada. “La siniestralidad laboral sigue siendo una de las asignaturas pendientes del mercado laboral en España. Año tras año, las cifras ponen de manifiesto la gravedad de la situación, sobre todo en lo que respecta al número de personas trabajadoras fallecidas por el simple hecho de acudir a su lugar de trabajo para ganarse la vida”, denunciaron en un comunicado conjunto CCOO y UGT.

El objetivo es dar visibilidad al “drama de la siniestralidad laboral y exigir el cumplimiento estricto de la ley y la búsqueda de soluciones que hagan efectivo el derecho fundamental de las trabajadoras y los trabajadores a entornos de trabajo seguros y saludables”.

Por este motivo, los dirigentes sindicales de CCOO y UGT mantendrán un ENCUENTRO INFORMATIVO con los medios de comunicación a las 11.30 horas, para explicar las razones que han llevado a esta movilización y exigir medidas para acabar con la lacra de los accidentes laborales.

LEVE MEJORA

Según los últimos datos provisionales del Ministerio de Trabajo y Economía Social, España registró entre enero y agosto de este año un total de 489 muertes por accidentes laborales, lo que supone un descenso de nueve en comparación con el mismo período de 2024 que, en términos relativos, se traduce en una bajada del 1,81%.

Como es habitual, las causas más frecuentes de los fallecimientos fueron los infartos y derrames cerebrales (169), golpes y caídas (64), aplastamientos o amputaciones (54) y accidentes de tráfico (52). Por el momento en que se producen, los óbitos se dividen en 398 durante la jornada de trabajo y 91 in itinere, con descensos de seis y tres muertes, respectivamente.

Pese a la leve mejora de las cifras generales, cabe destacar la evolución negativa que sufrieron en los ocho primeros meses del año los sectores de la construcción y la industria, con 113 y 71 muertes, respectivamente, tras repuntar en 20 y cinco. En sentido opuesto, mejoraron sus registros el sector agrario (hasta las 34 muertes) y los servicios (180).

Por regímenes, de las 489 muertes, 454 eran asalariados y 35 autónomos, protagonizando descensos de cuatro y cinco fallecimientos menos que en igual período de 2024. Al margen de los fallecimientos, los accidentes con baja laboral totalizaron 403.717, un 2,2% menos. De ellos, 346.764 se produjeron en jornada laboral y 56.953 in itinere.