EL CENTRO REINA SOFIA ABRE MAÑANA AL PUBLICO LA COLECCION ESTATAL DE ARTE DEL SIGLO XX

MADRID
SERVIMEDIA

El Centro Reina Sofía abrirá mañana oficialmente las puertas de su colección permanente, la que le confiere el título de Museo Nacional de Arte Contemporáneo, en la que se incluye una primera selección de los cuadros del siglo XX pertenecientes al Estado.

Desde su presentación, e sábado pasado, se han dejado oír voces de protesta en torno a la elección de los cuadros que conforman este primer escaparate, en el que se echan en falta movimientos como el "Dau al Set" y autores indiscutibles como Antonio López.

Pese a todo, la directora del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS), María Corral, ha afirmado siempre que quería hacer de esta colección un repaso general y no una sucesión de "obritas" excepcionales que dejase grandes huecos vacíos.

UN "PICASSO" ABANDONADO La muestra se abre con el cuadro "Mujer de azul", que Picasso pintó en 1901 para la Exposición Nacional de ese año y que permaneció arrinconado en un almacén durante mucho tiempo, después que el autor renunciase a recogerlo porque el jurado no le había prestado ninguna atención.

La primera sala, dedicada a representar el tránsito de finales del siglo XIX a los comienzos del XX, incluye también obras de Nonell, Zuloaga, Anglada Camarasa, Iturrino, Julio González y María Blanchard, que representan a fusión entre el arte tradicional y las nuevas tendencias que ya se apuntaban.

José Gutiérrez Solana ocupa en exclusiva el segundo ámbito de la exposición, que revela su peculiar posición estética, en la que el costumbrismo y la fidelidad a la realidad más cruda son los rasgos más representativos de su rebeldía frente a los nuevos impulsos pictóricos, que el pintor calificaba de blandos.

En el tercer espacio expositivo, esculturas, dibujos y cuadros de Julio González ofrecen el revés de la moned de Solana, marcados por la búsqueda de nuevas posiblidades de los materiales, que expresan las inquietudes que impregnaban a los artistas de los inicios del siglo.

RUPTURA RADICAL

La siguiente sala está dedicada a lo más representativo del cubismo, en su vertiente de ruptura más radical, representado por Juan Gris, María Blanchard, Salvador Dalí, Julio González, Rafael Barradas, Pablo Picasso y el escultor Pablo Gargallo.

La denominada "Escuela de París", compuesta por Francisco Bores, Pancho ossío, Benjamín Palencia, Moreno Villa y Olivares, y caracterizada por la "pintura pura", heredera directa del cubismo, las pinturas geometrizadas de Vázquez Díaz y el "ultraísmo" de Barradas, se mezclan en la sala quinta.

En el sexto ámbito, el Surrealismo, uno de los movimientos más extendidos en la España de la primera mitad del siglo, desde las pinturas de Planells y Massanet (influidos por la estética daliniana), hasta las esculturas de Benjamín Palencia, Alberto y Rodríguez Luna, pasando por lasreferencias del francés Jean Arp y el americano Alexander Calder.

LA MAXIMA ATRACCION

El "Guernica" de Picasso y sus estudios previos ocupan la séptima estancia, que será probablemente la más visitada, a juzgar por el interés despertado por este mural como principal reclamo de la colección estatal. Completan la sala obras de Dalí, Le Corbusier y Alberto.

Una nueva propuesta, dedicada a los autores realistas, de la mano de Togores, Sunyer, Velasco, Ponce de León o Fernández Balbuena, que se muevn entre el clasicismo y el realismo mágico, y la vertiente objetivista de Dalí, ocupan la sala octava.

Dalí es el único ocupante de la sala novena, a través de obras procedentes en su mayoría del legado del pintor al Estado español, tales como "Gran arlequín y pequeña botella de ron", "Los ibéricos" y "El enigma de Hitler".

La sala décima recoge algunos ejemplos de la escultura y pintura españolas producidas en torno a la Guerra Civil y a la Segunda Guerra Mundial, entre las que destacan los trabjos de Ferrant, Granell, Caballero, Wifredo Lam y Picasso.

LOS ULTIMOS AÑOS

Las salas once y doce están dedicadas a los informalismos, a través de las figuras más representativas de los años cincuenta y sesenta, como Torner, Tàpies, Cuixart, Chillida, Canogar, Saura, Millares, Rueda, Chirino, Guinovart, Feito, Lucio Muñoz, Zóbel, Rivera, Rafols Casamada, Guerrero y Mompó.

La sala trece está ocupada por las obras que Miró realizó en los años setenta, pertenecientes a su etapa más tardía, y la saa catorce contiene obras de los constructivistas Oteiza, Sempere, Palazuelo y el Equipo 57.

A partir de aquí, las salas numeradas del quince al veintitrés reflejan las propuestas que podemos considerar enclavadas en el momento presente, las adquisiciones más recientes de Chillida, Fontana, Navarro, Matta, Picasso, Bacon, Anish Kapoor, Schnabel, Gordillo, Arroyo y el Equipo Crónica, entre otros.

(SERVIMEDIA)
09 Sep 1992
J