El manifiesto reclama la puesta en marcha de cuatro líneas de actuación “urgentes” y centradas en la lucha contra el edadismo, el desarrollo de un plan nacional sobre envejecimiento saludable, la promoción de acciones preventivas que faciliten un envejecimiento activo y saludable y ayude a prevenir la dependencia y el establecimiento de un único calendario vacunal “vital, armonizado y equitativo pensado para prevenir enfermedades y dar vida a los años y no años a la vida”.

Para ello, el Manifiesto reivindica la puesta en marcha de 4 líneas de actuación urgentes y centradas en la lucha contra el edadismo (discriminación por razón de edad); la puesta en marcha de un Plan Nacional sobre envejecimiento saludable; la promoción de acciones preventivas que faciliten un envejecimiento activo y saludable y ayude a prevenir la dependencia; y el establecimiento en nuestro país de un único calendario vacunal vital, armonizado y equitativo pensado para prevenir enfermedades y dar vida a los años y no años a la vida, que mejore el acceso a vacunas que necesite la población mayor y que acabe con las discriminaciones que existen entre comunidades autónomas.

Alrededor de 9,4 millones de personas en España tienen más de 65 años, un colectivo que irá en aumento en las próximas décadas como consecuencia del progresivo envejecimiento de la población.

En el acto, la presidenta de Ceoma, Sabina Camacho, reclamó la puesta en marcha de iniciativas parlamentarias para que “los cambios que necesitamos los mayores se hagan realidad” y mostró su confianza en que el manifiesto sirva de guía en ese sentido.

Por esa razón, señaló que “el inevitable incremento de la población mayor en las próximas décadas hace imprescindible una actuación decidida de las administraciones y de los gobiernos en el muy corto plazo”.

Del mismo modo, la presidenta de Confemac, Gloria Veiga, indicó que “el envejecimiento activo actual se centra en facilitar opciones para la ocupación del tiempo libre de las personas que reciben servicios”. A pesar de que “eso está muy bien”, manifestó que “queremos seguir aportando y, por eso, apostamos por un envejecimiento activo emisor de ideas y alternativas que ayuden a mejorar la sociedad”.

Gloria Veiga concluyó su intervención dejando claro que “no queremos ser más ni menos que nadie. Nuestros derechos son los mismos que los del resto de las personas, pero, a partir de ciertas edades, no se respetan de la misma forma. Eso es edadismo”.