Así lo denunció en un comunicado en el que defendió que “el mensaje de odio promovido por algunos partidos políticos” ha “contribuido” a la creación de un “clima hostil” para las personas Lgtbi, así como hacia las personas con VIH/sida, con “ofensivos comentarios”.

“Normalizar estas actitudes discriminatorias en las instituciones y compartirlas en los medios de comunicación fomenta la estigmatización y el rechazo, generando un impacto negativo en la vida y el bienestar de la ciudadanía”, advirtió, al tiempo que aseveró que la existencia de grupos neonazis “que vociferan proclamas como: “Fuera sidosos y maricas de Madrid'” en el barrio de Chueca de la capital “evidencia cómo el discurso del odio en todas sus formas se materializa en violencia física real”.

A este respecto, la presidenta de Cesida, Reyes Velayos, aseguró que la coordinadora “va a trabajar sin descanso” para “promover” la “libertad, justicia, igualdad, la dignidad de la persona y el respeto a los derechos fundamentales” con el fin de “crear una sociedad más inclusiva, libre de violencia y discriminación”.

Tras puntualizar que, según el Ministerio del Interior, las agresiones Lgtbifóbicas experimentaron un “preocupante” aumento del 70% en el último año en España y que, según un informe de la ONG Ilga-Europa, 2022 fue “el año más violento en una década para el colectivo Lgtbi”, la coordinadora lamentó que en las últimas semanas han salido a la luz “múltiples y violentas” agresiones a la comunidad Lgtbi.

ÚLTIMAS AGRESIONES

Entre ellas, citó el caso de Conchi y Gema, una pareja que fue golpeada por 15 personas en un parque de atracciones en Madrid al grito de: “¡Vamos a ir a por ti, puta bollera asquerosa de mierda!” y el de un joven de 18 años que, tras oír un grito de "maricón" en las fiestas de Pozaldez (Valladolid), “se despertó sangrando en el suelo”.

Junto a ellos, señaló la paliza a una pareja gay de Villabona (Guipúzcoa), la hospitalización de un joven agredido durante las fiestas de Gallarta (Vizcaya), la aparición de grafitis “anti-Lgtbi” en "algunos pueblos", los mensajes homófobos que dos futbolistas del Betis “han sufrido por llevar bolso a una boda”, o la última agresión a una mujer trans en el metro de Barcelona.

A su juicio, estos “reprobables” sucesos “chocan con la realidad de nuestro país”, dado que España es el primer país europeo con más población no heterosexual, un 12% según la encuesta de Ipsos, y “gracias” a la ‘Ley Trans’, ocupa la cuarta posición en el ranking Arco Iris por ser uno de los países “más respetuosos con los derechos Lgtbi+”.

En este contexto y pese a reconocer que "se han logrado avances importantes en la legislación y reconocimiento de los derechos Lgtbi en España", Velayos criticó que todavía "existen desafíos y prácticas perjudiciales que deben abordarse para garantizar la plena igualdad y protección de este colectivo”. Asimismo, exigió a “todos los partidos políticos y líderes de opinión” que “asuman su responsabilidad y condenen de manera contundente cualquier forma de violencia o discurso de odio dirigido hacia el colectivo Lgtbi”.

Por último, como entidad miembro de la Alianza por la Ley de Igualdad de Trato, Cesida reclamó el “refuerzo” de las medidas de “protección y seguridad” de las personas Lgtbi y la protección “a las víctimas de todos los tipos de discriminación y violencia”.