Así se desprende de los últimos datos de Eurostat sobre mortalidad en carretera en la segunda categoría de la Nomenclatura de las Unidades Territoriales Estadísticas (NUTS-2), es decir, el equivalente en España a comunidades autónomas y ciudades autónomas. Esa información, recogida por Servimedia, corresponde a 242 regiones de la UE. El último año con información consolidada es 2021.

La UE registró ese año 19.917 muertes en carretera, lo que supone una tasa de 45 víctimas mortales por cada millón de habitantes, y 833.980 heridos (excluyendo Irlanda e Italia, que ofrecen datos).

Un total de 115 regiones registraron una incidencia de muertes en vías interurbanas por debajo del promedio de la UE, mientras que 126 tuvieron una tasa superior y una tuvo la media comunitaria.

Hay 15 regiones comunitarias con una tasa de 20 o menos muertes de tráfico en carretera por cada millón de habitantes. En esa relación se cuelan tres españolas: Ceuta, en el primer puesto (0 muertos por cada millón de habitantes); Melilla, novena (12), y Comunidad de Madrid, decimotercera (19).

La mayoría de esas regiones con tasas de mortalidad relativamente bajas eran predominantemente áreas urbanas, entre ellas cinco capitales: Bruselas (7 muertos por cada millón de habitantes), Viena (8), Estocolmo (9), Berlín (11) y Praga (20).

PEORES REGIONES

Por el contrario, 12 áreas regionales de la UE contabilizaron más de 100 muertes en carretera por cada millón de habitantes: la zona ultraperiférica de Guadalupe (Francia), con 159; Severozapaden (Bulgaria), con 133; el área ultraperiférica de Guayana (Francia), con 120; Sudeste (Rumanía), con 116; Alentejo (Portugal), con 113; Oltenia Suroeste (Rumanía), con 112; Peloponeso (Gercia) y Sur-Muntenia (Rumanía), con 109; Mazovia (Polonia), con 105; Severen tsentralen (Bulgaria) y Egeo Meridional (Grecia), con 103, y Nordeste (Rumanía), con 102.

Las regiones españolas más inseguras en carretera son Castilla y León (53 víctimas mortales por millón de habitantes), Castilla-La Mancha (51), Navarra (43) y Baleares y Galicia (39 cada una).

Algunas de las tasas de incidencia más altas de muertes en carretera en 2021 se registraron en regiones rurales, mientras que las zonas urbanas y capitales tuvieron tasas más bajas de víctimas mortales en siniestros letales en vías interurbanas, lo que puede estar relacionado con velocidades promedio más reducidas.