Estos campistas ilegales, que en algunos casos llevan instalados en esa playa todo lo que va de verano, no cuentan con las medidas higiénico-sanitarias y de seguridad que poseen los campings especializados.

Además, esta forma de acampar ilegalmente es la causa, según los propietarios de los campings,de que se esté produciendo una baja ocupación en este tipo de instalaciones.

Algunos propietarios de campings situados entre Matalascañas y Mazagón han denunciado la presencia de estas numerosas tiendas de campaña ante el Gobierno Civil, aunque por el momento esta práctica no se ha erradicado.

Durante los fines de semana, segun los empresarios, se pueden contabilizar en la zona más de 400 tiendas de campistas ilegales, lo que "resta clientela" a los campings de la costa oriental onubense.

LaAsociación Provincial de Campings denunció recientemente que las acampadas ilegales, junto con la actual crisis económica nacional, eran las principañes responsables de la baja ocupación que en este tipo de instalaciones se detecta en lo que va de verano.

La ocupación durante los fines de semana se cifró desde este colectivo entre un 60 y un 70 por 100, mientras que de lunes a viernes esta ocupación descendía hasta un 40 ó 50 por 100.