Recoder declaró a Servimedia que si los ataques a CiU se repiten en los próximos días y se comienzan a marcar distancias, puede influir en las relaciones entre el PP y CiU en Madrid.

Además, agregó, si el PP de Cataluña "cumpl su amenaza de distanciarse con hechos de CiU en las votaciones en el Parlamento de Cataluña, lo más probable es que la acción de Gobierno del PP aquí en Madrid se resienta y que a veces no tenga los apoyos parlamentarios que quisiera".

Añadió que el vicepresidente segundo del Gobierno, "cuando no habla de economía, a menudo hace declaraciones desafortunadas". No obstante, indicó que "un mal día lo puede tener cualquiera y unas declaraciones desafortunadas las puede tener cualquiera, también un viceprsidente primero del Gobierno".

Recoder dijo que puede que el PP haya decidido empezar "una nueva táctica de distanciamiento de nosotros", de cara a las elecciones catalanas, en principio previstas para marzo de 1999, ya que Rato y el secretario de Estado para las Relaciones con las Cortes, José María Michavila, "en el espacio de tres días que han visitado Cataluña, han aprovechado para hacer declaraciones no excesivamente conciliadoras con CiU".