LA CIUDADANIA EUROPEA AUN ES UNA UTOPIA, SEGUN UN INFORME DEL PARLAMENTO EUROPEO

BRUSELAS
SERVIMEDIA

Todavía queda mucho por hacer para alcanzar el objetivo de una ciudadanía europea: aún persisten ciertos controles fronterizos nteriores, hay importantes diferencias nacionales sobre el derecho a residencia, en algunos países los europeos no nacionales no pueden votar en las elecciones municipales de su país de residencia... Así lo denuncia un informe aprobado por la Comisión Jurídica y de Derechos de los Ciudadanos del Parlamento Europeo.

El presidente de esta comisión, el belga Willy De Clercq, insta a los Estados miembros a que integren el tratado de Schengen en la UE. Este tratado, al que España ya está adscrito, obliga ala abolición de todo control en las fronteras internas, pero no forma parte de los tratados de la UE y, por lo tanto, es voluntario. De Clercq cree que ésta es la única forma de garantizar la libertad de circulación de los ciudadanos de la Unión Europea.

También para una mayor libertad de circulación, el informe se dirige a la Comisión Europea para que acabe, mediante un propuesta legislativa, con las diferencias existentes entre los Quince en materia de derecho de residencia.

De Clercq se muestr muy crítico con su propio país y con Francia por no haber transpuesto las directivas que permiten a los ciudadanos europeos votar en los comicios muncipales de sus lugares de residencia, sin ser nativos del país. En España, este derecho ya pudo ejercerse en las últimas elecciones locales.

Por último, el informe lamenta que el derecho de protección consular y diplomática no se haya puesto aún realmente en práctica. Recomienda a los Estados miembros que elaboren una definición común de la protección delos ciudadanos de la UE por parte de las representaciones diplomáticas.

(SERVIMEDIA)
20 Mayo 1998
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