Tras encadenar malos resultados electorales en 2021 y 2022, Ciudadanos optó por una remodelación del partido en la que hubiese una estructura de bicefalia, con una parte más orgánica liderada por un secretario general y otra más política con un portavoz nacional al frente. Además, se acordó elegir un nuevo líder o reelegir a Inés Arrimadas.

Sin embargo, las desavenencias entre ella y el que fuera portavoz adjunto del partido en el Congreso de los Diputados, Edmundo Bal, hicieron que hubiera dos listas que concurrieron a las elecciones primarias de enero, la liderada por Bal y Santiago Saura, y la de Patricia Guasp y Adrián Vázquez, que cerraba la propia Arrimadas.

La votación de los militantes hizo que Ciudadanos iniciara 2023 con una nueva dirección nacional, en la que Guasp pasó a ser la portavoz nacional del partido y Vázquez el secretario general. Pese a que algunos problemas internos seguían, el partido optó por centrar sus esfuerzos en las elecciones municipales, para tratar de mantener su representación.

Pese a ello, y como auguraban las encuestas, Ciudadanos desapareció de los parlamentos en todas las comunidades excepto en Castilla y León y Cataluña, donde no se celebraron comicios el 28 de mayo, y de los que 2.787 concejales con los que se presentó a estas elecciones, el partido se quedó con tan solo 393.

ELECCIONES GENERALES

Asimismo, el resultado que más afectó al partido en los comicios de mayo fue el del Ayuntamiento de Madrid, su último bastión. A pesar de los esfuerzos de la vicealcaldesa, Begoña Villacís, no pudo mantener ni su propio escaño, en beneficio de José Luis Martínez-Almeida, quien asumió los concejales de Ciudadanos y obtuvo mayoría absoluta.

Estos nuevos malos resultados llevaron al partido a convocar una reunión urgente del Comité Nacional de Ciudadanos, que decidió no concurrir a las elecciones generales del 23 de julio porque no había “especio electoral” para este partido y así podía ahorra recursos, especialmente económicos, para la cita electoral europea de 2024.

Esta decisión no fue compartida por una parte del partido y las críticas hacia la misma y hacia la labor de la dirección nacional de Ciudadanos fueron constantes por parte de Bal y Francisco Igea, quienes les acusaron de haber dejado “huérfanos” a una parte de los electores. A ambos les abrieron un expediente disciplinario y finalmente fueron expulsados de esta formación.

Una vez tomada esta decisión de no concurrir a las generales, Arrimadas anunció que abandonaba la política. Además, entre otras marchas y renuncias que sufrió el partido, hay que sumarle que Ciudadanos salió de la que fue su sede central desde 2015 para instalarse en un nuevo espacio situado en la calle Príncipe de Vergara.

EUROPA Y CATALUÑA

Ante este panorama, Ciudadanos aprovechó julio y especialmente agosto para realizar un parón informativo en el que no realizaron actos, ni ruedas de prensa, ni comparecencias ni prácticamente entrevistas en medios. Además, Guasp anunció que retomaba su profesión en el sector privado y dejó de ser la portavoz nacional del partido.

Quienes sí continuaron activos y opinando sobre el panorama político fueron los diputados de Ciudadanos en el Parlamento catalán, liderados por Carlos Carrizosa, y los eurodiputados del Parlamento europeo. Todos ellos rechazaron de manera frontal la ley de amnistía que se pretende conceder a las personas vinculadas con el ‘procés’.

Así, el partido está centrando sus esfuerzos en Europa y Cataluña, con la vista puesta en las elecciones europeas del 9 de junio de 2024 y en los comicios catalanes que, si no hay adelanto electoral, se celebrarán en 2025. Las perspectivas no son buenas, pero Ciudadanos espera poder rearmarse y hacer un buen papel en estas nuevas citas electorales.

Para conseguirlo, recientemente el eurodiputado Jordi Cañas fue elegido como nuevo portavoz político del partido tras haber sido el único de los siete candidatos que alcanzó el 10% de los avales necesarios en este proceso. Desde finales noviembre, lidera junto a Vázquez Ciudadanos, tratando de relanzar el proyecto.

ELECCIONES EUROPEAS

El Comité Nacional del partido ratificó que Ciudadanos se presentará a las elecciones europeas y también a los comicios catalanes. Antes de ello, el partido deberá terminar un proceso en el que lleva sumergido desde hace tiempo de remodelación de la marca y del proyecto.

Empleando el símil que utilizó Vázquez cuando se postuló a secretario general en enero, fuentes del partido señalaron que el “vehículo”, que es el partido, “no tiraba” y había que relanzarlo, ya sea con la misma marca o con una distinta, algo que aún no está definido, pero lo que sí merece una “vuelta de tuerca” es el proyecto.

De cara a estas elecciones europeas, Ciudadanos se ve “optimista” por cómo son, ya que se trata de unos comicios de circunscripción única y el porcentaje de voto necesario para obtener representación es bajo. Por ello, consideran que son “más amables” para el partido que las elecciones generales.

Según señalaron las citadas fuentes, el “pistoletazo de salida” de su oferta de cara a los comicios europeos tuvo lugar con la celebración de un debate sobre el Estado de derecho, una jornada organizada por Renew Europe, grupo en el que está integrado Ciudadanos, en la que participaron el exlíder del PSOE vasco Nicolás Redondo y el exministro socialista Jordi Sevilla.