Según informó Competencia este jueves, el sector económico afectado es el de la fabricación de productos básicos de química inorgánica y orgánica, en concreto, los mercados del cloro y sus derivados, en los que se solapa la actividad de las partes: cloro, sosa cáustica, ácido clorhídrico e hipoclorito sódico.

La CNMC considera que los compromisos que ha presentado Bondalti durante la segunda fase de la investigación son “adecuados, suficientes y proporcionados” para solucionar los problemas de competencia.

Bondalti notificó la compra de Ercros el 9 de julio de 2024. Durante la primera fase del análisis, la CNMC detectó riesgos para la competencia en los mercados de sosa cáustica e hipoclorito sódico. En diciembre, acordó iniciar la segunda fase de la investigación. En el mercado de la sosa cáustica, donde la entidad resultante ostentará cuotas superiores al 30% a nivel nacional, se descartó finalmente la existencia de riesgos para la competencia por la presencia de otros operadores y la presión competitiva.

Mientras, en el mercado de hipoclorito sódico, analizado en áreas de 400 kilómetros de radio desde las plantas de producción de las partes, la entidad resultante ostentará cuotas superiores al 50%, con lo que la CNMC concluyó que la operación supone un riesgo para la competencia en las áreas donde se solapan las fábricas, particularmente entre la de Torrelavega y las de Sabiñánigo y Vila Seca.

Por ello, Bondalti propuso como compromisos suministrar hipoclorito a terceros fabricantes al precio de coste hasta un máximo de 85.000 toneladas anuales, con una oferta marco que la CNMC deberá aprobar, el compromiso durará inicialmente cinco años hasta un máximo de 15 años y un administrador independiente supervisará el cumplimiento de las obligaciones asumidas por Bondalti y la CNMC lo hará durante el tiempo estipulado.

La autorización de Competencia no es definitiva, pues se comunicará al ministro de Economía, Comercio y Empresa para que decida si procede elevarla al Consejo de Ministros, que en su caso podrá valorar la operación atendiendo a criterios de interés general distintos de la defensa de la competencia.