Según informó el Consistorio, el pasaje permanecerá cerrado hasta verano aunque se mantendrá en todo momento un itinerario accesible alternativo en superficie. En cualquier caso, durante las obras, se mantendrá el acceso a la estación de Metro de Retiro. El túnel cuenta con 42 metros de longitud y permite a los peatones salvar los ocho carriles de la callé Alcalá en el tramo paralelo al parque.

El proyecto plantea una nueva imagen para el interior del paso, que hará guiños a la naturaleza del parque y a la Feria del Libro que se celebra allí cada año. Además, se mejorará el alumbrado, que pasará a ser más eficiente, y se colocarán nuevos pavimentos de granito en la rampa de acceso desde Lagasca y en el interior del paso, así como un pavimento continuo de microaglomerado en color tierra en la rampa de entrada al parque.

El proyecto, que cuenta con un presupuesto de 395.000 euros, ha sido visado y autorizado por la Comisión Local de Patrimonio Histórico de Madrid, ya que la zona en la que se encuentra, pertenece al Paisaje de la Luz, que está protegido por la Unesco.